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La Oficina de Defensa del Mayor recibe 230 llamadas de León para desheredar

En el Día Internacional de las Personas Mayores, pensionistas y jubilados visibilizan la soledad, el suicidio, la vulnerabilidad y pobreza de una pinza de población que va en aumento
Editorial: 'Cuidar a los que cuidaron, reto del siglo XXI'

Marcelo Cornellá en su despacho en Madrid. DL

León

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Padres y madres que se sienten desatendidos por sus hijos, hermanos que no están contentos con la dedicación que cada uno presta a sus mayores, nietos que no van a ver a sus abuelos, conflictos familiares.... La Oficina del Defensor del Mayor de la Fedepem (Federación Nacional de Defensa de las Personas Mayores) recibió el año pasado 230 llamadas desde León para consultar, mayoritariamente, por el procedimiento a seguir para desheredar a los hijos. El presidente de la federación y director de la oficina, Marcelo Cornellá Prieto, recibe más de 10.000 consultas de toda España para resolver dudas sobre cómo actuar legalmente para desheredar a los familiares directos. «La mayoría de las llamadas que recibimos son por problemas de atención en las residencias y desatención de los hijos. Preguntan cómo tienen que hacer para desheredar para que la justicia respete esa decisión en caso de que los hijos impugnen el testamento».

En el Día Internacional de las Personas Mayores que se conmemora hoy, Cornellá llama la atención de un cambio social en el que «se ha perdido el respeto a los mayores». La falta de diálogo, los conflictos familiares y «el desapego» de los nietos, que «ignoran la vida de sus abuelos».

El equipo de abogados de la Oficina del Defensor del Mayor que trabaja con la federación ofrece asesoramiento gratuito a los mayores, aunque los conflictos familiares que se plantean pueden pasar antes por un servicio de mediación. «Nuestra experiencia es que no es normal que el conflicto se solucione con la mediación».

En una población cada vez más envejecida, Cornellá insta a recuperar «los valores de la familia», pérdida que atribuye a la educación y a las nuevas tecnologías. «Los nietos ya no quieren ir a ver a sus abuelos» crítica que corrobora con los datos de una encuesta que la Fedepem realizó en un colegio de Madrid entre estudiantes con edades comprendidas entre los 11 y los 18 años. «El 72% desconocía aspectos fundamentales de la vida de sus abuelos, dónde habían nacido, a qué se habían dedicado o su trayectoria vital. Todo eso se debe a la ausencia de relación».

Una ausencia de relación que para Cornellá lleva aparejada la soledad no deseada o el suicidio. «Las personas mayores que nadie visita, que no tienen relación con sus hijos, entran en un proceso de depresión en el que dejan de tomarse la medicación y se dejan morir».

Asegura que Castilla y León es una de las comunidades en las que mejor se realiza la conciliación con los mayores. «Hay muchas asociaciones que se preocupan de ellos, quizás habría que unificar esos esfuerzos. Hay que acabar con la pandemia de la soledad».

Para el presidente de Fedepen, los 55 años es la edad crítica en la que una persona, por lo general, empieza a considerarse mayor. Una pinza de población cada vez mayor. En la provincia de León hay 201.813 personas mayores de 55 años, una población ha aumentado en 92.063 personas desde hace 52 años, cuando en León vivían 109.750 personas de esa edad. Y el envejecimiento aumenta. En 1998 había 44 personas de más de cien años en la provincia de León. En el último dato del Instituto Nacional de Estadística, a 1 de enero de 2023 vivían 306.

El Procurador del Común de León ha emitido resoluciones relativas a la demora en los procedimientos en el reconocimiento de la discapacidad o la accesibilidad en el transporte público urbano de personas en silla de ruedas en Ponferrada. También se ha pronunciado a favor de que el transporte urbano en León sea gratis para los acompañantes de personas con discapacidad y se ha interesado por la rampas de acceso de los autobuses de León, así como la necesidad de un servicio de atención personalizada y preferente en la administración pública, o la lectura accesible en las notificaciones efectuadas por el Ayuntamiento de León.

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Protección social

Los sindicatos UGT y CC OO centran sus reivindicaciones en la protección social, la dependencia, la solución de las listas de espera en el ámbito sanitario y la pobreza energética vinculada a las facturas de las viviendas a través de pensiones dignas.

Desde CC OO señalan que las personas mayores presentan en su día a día «muchas deficiencias», al ser un colectivo «mucho más vulnerable de lo que la sociedad piensa».

El secretario de Acción Sindical y coordinador del Diálogo Social de UGT en Castilla y León, Raúl Santa Eufemia, solicita la disminución de los plazos de resolución de los expedientes de dependencia, promover la mejora de la formación y capacitación de los profesionales, tanto en los propios domicilios como en residencias; y aumentar las cuantías de las prestaciones vinculadas a servicios.