Palomas de León vuelan por una infancia feliz y participativa

Una suelta de palomas mensajeras puso el colofón a los actos del Día Internacional de los Derechos de la Infancia en León en Espacio Vías, protagonizado por alumnado de seis colegios de la capital. "Queremos participar ayudando a los pueblos afectados por la dana", fue uno de los mensajes infantiles que volaron por el cielo de León.

En una provincia en la que cada vez hay menos nacimientos -León tiene la segunda tasa de nacimientos más baja de la Comunidad- las palomas alzaron su vuelo portando el mensaje por una infancia feliz y para que niños, niñas y adolescentes sean escuchados y sus opiniones sean tenidas en cuenta por la sociedad.

Alumnas y alumnos del Colegio Leonés San Isidoro, el colegio de educación especial San Nicolás de Bari, el Ceip San Isidoro y los IES Padre Isla, Antonio García Bellido y Legio VII fueron los protagonistas de esta jornada que conmemora la Declaración Universal de los Derechos del Niño (1959) y la aprobación de la Convención de los Derechos del Niño (1989) y la aprobación de leyes en diversos países, entre ellos España, a partir de 1990.

Los escolares eligieron el derecho a la educación, el derecho a la no discriminación, el derecho a la inclusión, el derecho a la familia y los derechos a jugar y a la salud en sus intervenciones particulares.

En el manifiesto, elaborado por escolares del Consejo Municipal de la Infancia en cooperación con otros consejos de la Comunidad, defendieron que "somos la parte más vulnerable, pero la más importante" porque "debemos convertirnos en personas útiles para la sociedad".

La infancia leonesa habló desde la conciencia de que "no todos los niños y niñas tienen los mismos derechos". El manifiesto focalizó las reivindicaciones de los niños y niñas de Castilla y León en el derecho a la participación. La participación está regulada en el artículo 12 de la Declaración de los Derechos de la Infancia, que reconoce que no solo deben respetarse las opiniones de niños y niñas, sino también deben ser escuchadas y tomadas en cuenta.

Junto a la libertad de expresión y de conciencia se reivindicó el asociacionismo como una forma de evitar la exclusión de niños y niñas. "Elegimos la asociación como fórmula jurídica sencilla para iniciarnos en la participación infantil", que debe "ser transparente, voluntaria, respetuosa, pertinente, amigable y en horarios que faciliten la inclusión", enfatizaron. También pidieron formación para que la participación sea de calidad.

"Queremos participar ayudando a los pueblos afectados por la dana", concluyeron para reclamar que la participación infantil "no sea sólo simbólica sino protectora y segura para nosotros".

La celebración continuó con la obra de teatro Ridi Paglaccio, de Asaco Producciones, una compañía extremeña que con un formato de payasos clásicos y la ópera como telón de fondo se convirtió en un espectáculo desternillante.