Raphael, estable y consciente tras someterse a un trasplante de hígado

Los facultativos permanecen atentos a la evolución del cantante, dado que en este tipo de intervenciones es «muy elevada» la posibilidad de rechazo del injerto. En todo caso, el sistema hepático de Raphael ha comenzado a responder al tratamiento. Dado el estado de extrema gravedad en que se encontraba el artista, el equipo médico tenía previsto realizar la próxima semana un trasplante de lóbulo, procedente de un donante próximo a Raphael. Sin embargo, este martes fue encontrado un órgano compatible -tamaño y grupo sanguíneo- que le correspondía al cantante dentro de la lista de espera de receptores, por lo que fue intervenido de urgencia por el doctor Enrique Moreno, responsable de la Unidad de Cirugía y Trasplantes del hospital. Empeoramiento progresivo Raphael, de 59 años, tuvo una importante recaída a principios de enero, por la que fue internado en la madrileña clínica de La Luz. Tras ser dado de alta, el día 13 de ese mes volvió a tener otra recaída. Los médicos que le atendían determinaron la urgencia del transplante de hígado para que el cantante pudiera salvar su vida. La familia y los facultativos pusieron en marcha el mecanismo para encontrar un donante de hígado. De manera paralela, los médicos buscaron entre familiares y amigos de Raphael a un donante a quien extirpar un lóbulo de su hígado e implantárselo al cantante. Desde que Raphael cosechó un importante éxito con el musical Jekyll y Hide no se cansó de repetir con entusiasmo el buen momento en que se encontraba. Sin querer hablar de retirarse, Raphael continuaba sumido en todo tipo de proyectos. La última vez que el incansable Raphael apareció ante el gran público tuvo lugar las pasadas navidades en el programa especial de Nochebuena que fue emitido por TVE-1. En el interpretó conocidos villancicos junto a artistas como Alaska, Marta Sánchez o David Bisbal. En una de sus últimas entrevistas durante la grabación del especial navideño, Raphel afirmaba que se sentía con ganas de empezar de nuevo y no quería pensar en retirarse. «Afortunadamente sigo manteniendo el mismo entusiasmo, porque sin él esta profesión no es nada», dijo. Entre los proyectos que tenía para el 2003 estaba el estreno de otro musical y, a partir de abril, la grabación de un disco que está componiendo con Enrique Bunbury. Sus seguidores, repartidos por todo el mundo, esperaban este nuevo álbum desde el año 2001, cuando el veterano cantante sacó Raphael, maldito Raphael con temas que fueron éxitos en las voces de Miguel Bosé, Baccara, Aretha Franklyn o Radio Futura, entre otros importantes intérpretes.