Cientos de personas acudieron al claustro de la basílica de San Isidoro para presenciar el tradicional encuentro.
Los representantes de la iglesia son los encargados de defender el caracter obligatorio de la ofrenda al santo.
Clérigos y políticos protagonizan el tradicional pleito multisecular de Las Cabezadas, que se celebra desde hace 845 años.
Con este encuentro se trata de determinar el origen de la ofrenda del pueblo de León a San Isidro con un interesante duelo diálectico entre los representantes del síndico municipal y los del cabildo.
Este acto despierta gran espectación entre los leoneses por los argumentos con los que cada uno de los representantes defienden sus posturas.
Teodomiro Álvarez fue el encargado este año de defender la tradición de otorgar al pueblo la obligación de la ofrenda al santo.
Algunos afortunados pudieron seguir el encuentro desde los balcones del cabildo.
El pueblo y la iglesia se enfrentan en este peculiar debate que concentra a cientos de leoneses todos los años.
Amilivia entregó al representante de los clérigos un cirio pascual y dos hachones de cera, tal y como manda la tradición.
Los pendones coronaron el encuentro.
Los vivos colores de los estandartes destacan entre la belleza de la basílica de San Isidoro.
El desfile de pendones, muchos de ellos con varios siglos de antigüedad, despierta la atención de los visitantes.
En el acto participan políticos de todos los partidos con representación en el Ayuntamiento de León. En la imagen, Javier Chamorro, de la UPL.
Momento en el que los reprensentantes municipales presentan sus respetos a San isidoro.
Afortunadamente, y en contra de lo sucedido días anteriores en Semana Santa Santa, la lluvia no hizo acto de presencia en el encuentro, que se salvó del agua.
Los pendones provienen de las distintas comarcas de la provincia leonesa.
Este encuentro, que como siempre se saldó con un empate entre los dos portavoces, se celebra desde hace más de ocho siglos.
El cielo amenazó con lluvia durante el encuentro.
La torre de San Isidoro, actualmente en proceso de restauración, destaca entre los pendones.