Las cien caras de la trucha

El Concurso-Exposición Gastronómico de la Trucha organizado por la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de León (Apeht) alcanzó ayer su trigésimo séptima edición. Una cita en la que, según el presidente de la Apeth, Esteban Díez, «se ha conseguido el objetivo que se había marcado la organización, que era superar los cien platos», al tiempo que se ha sobrepasado el nivel de participación del año pasado, ya que en esta edición fueron 42 los cocineros participantes en el certamen, con lo que se igualó la cifra alcanzada en el 2001. Un año más, el gran triunfador de la jornada fue el cocinero valenciano Víctor Vicente Navarro del Restaurante Casa Granero -Serra, Valencia-, que ser alzó con el galarón más preciado, al Trucha de Oro al Mejor Plato de Presentación por el plato «La Trucha es la reina». Además, el cocinero valenciano consiguió dos premios más: Trucha de Bronce al mejor plato Degustación y el de mejor plato libre presentación por «Una matanza en el pueblo». En la modalidad de Degustación, la Trucha de Oro se la llevó el Restaurante del León Club de Golf, por el plato «Trucha en vestidera con caravineros del mar». Como recuerda Díez, este concurso nació hace 37 años «a iniciativa de un grupo de empresarios de la provincia que buscaban resaltar gastronómicamente la trucha, coincidiendo con el acontecimiento deportivo que supone la Semana Internacional de la Trucha». Datos que hacen de éste «un concurso consolidado, que reúne todas las condiciones para que se le declare de interés turístico regional, puesto que el Ayuntamiento de León ya ha reconocido su interés provincial». Así, de los 42 cocineros presentes ayer en el Hostal San Marcos, 11 eran de la capital leonesa, 21 del resto de la provincia y los 10 restantes de lugares como Meliana y Serra (Valencia), Denia (Alicante), Burgos, Madrid, Íscar y Pedrajas de San Esteban (Valladolid) o Candás (Asturias). Participantes cuyos 102 platos compitieron en las categorías de Trucha-Degustación, Libre-Degustación , Repostería-Degustación, Trucha-Presentación Libre-Presentación, Libre-innovación, Libre-Tradición y Repostería-Presentación. El concurso alcanzó un alto nivel, pudiendo contemplarse verdaderas maravillas de la «arquitectura gastronómica». No en vano, el jurado y quienes se acercaron hasta el parador pudieron contemplar obras como las de Víctor Vicente Navarro del restaurante Casa Granero de Serra, quien dedicó dos noches enteras a su obra, entre la que destacaban un castillo y un palacio hechos de margarina, mantequilla, galletas, chocolate y mazapán, a cuyos pies yacían extasiadas, como no podía ser de otro modo, varias truchas de diferente preparación. Aunque el restaurante Azul Montearenas de Ponferrada no le iba a la zaga, ya que entre sus platos se encontraba una reproducción del Faro de Hércules realizada en grasa de hojaldre, así como paté de trucha asalmonada acompañado por queso mascarpone italiano. Platos que, al igual que el resto de los presentados por el restaurante berciano, estaban montados sobre pizarra típica de la zona.