Operativo contra incendios 2003 Novedades para la campaña de este año en la lucha contra el fuego

Como en temporadas anteriores, la Consejería de Medio Ambiente ha puesto en marcha el operativo específico de detección y extinción de incendios para el periodo de máximo riesgo (entre el 15 de julio y el 15 de septiembre), que forma parte del conjunto de actuaciones que se desarrollan a lo largo del año para evitar y prevenir este tipo de siniestros que tantos perjuicios ecológicos, económicos y sociales causan en nuestra Comunidad. Las tareas de prevención (claras, cortas de mejora o entresacas, cortafuegos), que se aplican a lo largo de todo el año, constituyen la parte más importante para enfocar de manera integral la lucha contra los incendios en Castilla y León. En este sentido, conviene destacar que de los 59 millones de euros que constituyen la inversión para el año 2003, 40 corresponden a tareas de prevención (el pilar básico de las acciones para minimizar los daños producidos por el fuego), mientras que los 19 restantes constituyen el operativo específico de detección y extinción. Según adelantó la consejera de Medio Ambiente, Silvia Clemente, «hasta el pasado 1 de junio hemos tenido 232 incendios que han afectado a 275 hectáreas de superficie arbolada, lo que supone una reducción del 85% con relación a las mismas fechas del año pasado. Además de las lluvias que han mantenido la humedad en el campo, ha influido que los incendios han sido atacados rápidamente lo que ha permitido su extinción de manera inmediata». Prevención y extinción Entre las medidas preventivas, la consejera recordó la importancia del Plan 42, en marcha desde enero del año pasado, que permite aplicar una política directa para evitar la mayor parte de los incendios que se producen mayoritariamente en 104 municipios de las provincias de León, Zamora, Burgos y Ávila. Según afirmó Silvia Clemente, «se desarrollan quemas controladas y medidas de concentración forestal y desbroces, así como actividades de formación y educación ambiental para erradicar el uso del fuego como herramienta de control del matorral». En el operativo de extinción, Castilla y León dispondrá de 29 aeronaves, 21 de la Consejería de Medio Ambiente (18 helicópteros y 3 aviones) y 8 del Ministerio de Medio Ambiente (5 aviones y 2 helicópteros). Como novedad, este año habrá un helicóptero en el que viajará un técnico especializado para coordinar todos los medios aéreos que intervienen en los incendios. En cuanto a los medios terrestres, la consejera destacó la presencia de 177 autobombas (vehículos todo terreno que suministran agua a presión), 174 torretas de vigilancia y 14 equipos de maquinaria, es decir, tractores de cadenas tipo buldózer, muy efectivos para acometer los incendios más peligrosos y virulentos. Además, se cuenta con Unidades Móviles de Meteorología y Transmisiones que se sitúan en los puntos de ataque de los incendios que están provistas de equipamientos que permiten transmitir su evolución y coordinar los medios aéreos y terrestres. En total, son 3.974 personas de las que 1.500 permanecen operativas durante todo el año. Silvia Clemente destacó la labor de coordinación que se desarrolla para luchar contra los responsables de los incendios. En este sentido, recordó la firma de un convenio con el Consejo General del Poder Judicial para estrechar el cerco a los pirómanos, y que a partir de este año hay 9 Brigadas de Investigación de Incendios Forestales, una por provincia, encargadas de determinar la causa de cada incendio. Su balance global ha quedado demostrado porque, desde su creación en 1998 se han producido 812 informes, de los que 212 fueron entregados a las Fiscalías provinciales, realizado 86 detenciones y sólo en este año ha habido 5 sentencias condenatorias. Por último, la consejera de Medio Ambiente explicó las novedades de la campaña, consistentes en dos proyectos que dependen de la Agencia Espacial Europea. Se trata del Remfiresat que permite, a través de tecnología GPS y comunicación vía satélite, tener información real de los medios terrestres, conocer de forma simulada el comportamiento de un incendio y disponer de los medios necesarios para su extinción. Aunque se ubicará de forma experimental en Salamanca, dispondrá de información del riesgo y condiciones meteorológicas de toda la Comunidad. El segundo sistema, Gemes-Riskeos, que será aplicado en León, Zamora y Salamanca, permitirá disponer de imágenes de los incendios, identificar su superficie y tipo de vegetación quemada, así como la titularidad de la propiedad lo que servirá para aplicar la penalización de las quemas ilegales.