El fallecimiento se produjo cuando los médicos intentaban separar la arteria que las unía
Las siamesas mueren después de que les separaran el cerebro
El riego sanguíneo era inestable lo que estuvo a punto de parar la operación en varias ocasiones
? Las siamesas iraníes Ladan y Laleh Bijani murieron ayer en el quirófano de un hospital de Singapur con poco tiempo de diferencia, justo después de que fueran separadas. El director ejecutivo del hospital Raffles, Lou Choon Yong, informó en una rueda de prensa de que las dos «han muerto durante la operación debido a la gran cantidad de sangre que perdieron». Los corazones de las dos hermanas, que llevaban veintinueve años unidas por la cabeza, dejaron de latir con una hora y media de diferencia (06.30 y 08.00 GMT). El médico señaló que la intervención, que empezó el domingo pasado, presentó las primeras complicaciones el lunes cuando detectaron que el riego sanguíneo en los cerebros de la siamesas era inestable. «Nos planteamos la posibilidad de detener la operación y llevar a las pacientes a una unidad de cuidados intensivos», dijo Yong. Pero añadió que la detención de la intervención en el estado avanzado en el que se encontraba -la división de la masa cerebral ya había comenzado- no garantizaba la supervivencia de las siamesas. Los cirujanos habían separado el cráneo sin problemas, aunque se encontraron unos huesos más duros y compactos de lo previsto, y habían conseguido establecer el «bypass». Los cerebros de Ladan y Laleh Bijani estaban unidos sólo en un treinta por ciento, pero el suministro de sangre provenía de la misma arteria. El director ejecutivo del hospital Raffles indicó que a las 05.30 GMT de hoy acabaron de separar las masas cerebrales de ambas hermanas, con lo cual dejaron de estar unidas. «Había una hemorragia, pero parecía que la toleraban bien», indicó Yong, pero en pocos minutos la pérdida de sangre aumentó y las siamesas entraron en estado crítico. Poco después la primera de ellas murió, al cabo de hora y media su hermana.