Recientemente recibió un homenaje en Miami, por su carrera artística de más de 50 años, tres meses después de haber sufrido una operación de un tumor canceroso en el cerebro.
La "Guarachera de Cuba" estuvo acompañada en los últimos momentos de su vida por su esposo, Pedro Knight, y otros miembros de su familia
Una ciudadana de la comunidad cubana de Miami deposita una flor en la estrella de la fama en honor de la legendaria cantante situada en el barrio Pequeña Habana de Miami
La intérprete de "La vida es un carnaval" se dio a conocer en La Habana cuando aún era muy joven. Un primo suyo la llevó a un concurso musical de aficionados en el que por primera vez en su carrera ganó el máximo galardón.
Estudió en el Conservatorio de Música de Cuba desde 1947 a 1950. En ese año se lanzó a la música como solista de la orquesta Sonora Matancera.
Tras el triunfo de la Revolución encabezada por Fidel Castro la cantante se trasladó a Nueva York. Nunca volvió a su país natal aunque dejó allí a muchos amigos.
En 1965 dejó la orquesta Sonora para fichar por la de Tito Puente, el "rey de los timbales". Se unió luego a la Fania All-Stars con la que terminó por convertirse en la referencia del mundo hispano.
Siempre se caracterizó por ser una de las cantantes más camaleónicas en los escenarios. Hizo famosas sus pelucas de colres.
La cantante grabó casi un centenar de discos, con los que hizo bailar a todo el mundo.
La artista cubana Celia Cruz durante un concierto en Barcelona, dentro del Festival Grec 2001.
Cantó con los mejores artistas del planeta, como es el caso de Luciano Pavarotti, con quien compartió escenario en el 2001.
Celia Cruz dijo más de una vez que "no pienso morirme nunca. Y se mi llevan, será cantando. La música, y espero que mis canciones, vivirán siempre".
Celia Cruz era toda vitalidad, cariño, buen humor, como se pudo comprobar durante su visita a Santiago, en 1999.