Cinco incendios incontrolados asolan la provincia de Barcelona

Un auxiliar forestal, Isaac G. B, de 22 años, falleció el martes por la noche como consecuencia del accidente sufrido por el camión de bomberos en el que viajaba, que se dirigía a La Granja d'Escarp (Lleida), para sofocar un incendio. En el mismo suceso quedaron heridos otros tres auxiliares forestales y dos bomberos que están ingresados en el Hospital Universitari Arnau de Vilanova de Lleida. El accidente se produjo alrededor de las once de la noche del martes. El camión, que pertenecía al parque de bomberos voluntarios de Ponts, se dirigía por la carretera C-45, a la altura del término municipal de Serós, hacia La Granja d'Escarp donde se había declarado un incendio que finalmente quemó 1.500 hectáreas de matojos y olivos. El vehículo sufrió un pinchazo en una rueda y se salió de la calzada dando diversas vueltas de campana. De los cinco agentes de Bomberos que resultaron heridos en el accidente, dos se encuentran graves, uno menos grave, otro estable y otro leve, aunque todos ellos evolucionan satisfactoriamente. Por otra parte, el incendio que afecta al término municipal de Tordera, en la comarca del Maresme (Barcelona), sigue fuera de control y, desde su inicio, hacia las 14.54 horas de ayer, ya ha quemado más de 180 hectáreas, según han informado los Bomberos de la Generalitat. El otro incendio de Barcelona que se declaró ayer en el término municipal de Sant Miquel d'Olérdola ha obligado a evacuar preventivamente a los propietarios de una masía y a unos 150 niños que se encontraban en la casa de colonias Cal Pinar del municipio vecino de Canyelles. Entre los dos incendios trabajan treinta dotaciones terrestres y siete aéreas. Los incendios declarados ayer por la tarde en Maçanet (comarca de La Selva) y en Tordera (Maresme) se encuentran «muy próximos», continúan activos y suman más de 300 hectáreas quemadas, informaron los Bomberos de la Generalitat. Los más de 100 evacuados (de una urbanización y dos masías) por el fuego de Tordera aún no han podido volver a sus casas. También se mantienen las evacuaciones, por el incendio de Tordera, de de cuatro urbanizaciones. El ejército desplazó ayer a Sant LLorenç de Savall 3 camiones y 5 vehículos todo terreno para el transporte de bomberos y voluntarios, según han informado fuentes de la Delegación del Gobierno en Cataluña. Las Fuerzas Armadas también facilitarán a la Generalitat picos y palas para que bomberos y voluntarios puedan seguir luchando contra el fuego. Nuevos focos Por otra parte y fuera ya de Cataluña, diversos medios de extinción terrestres y cuatro helicópteros trabajan con intensidad contra el incendio que la madrugada de ayer se declaró en el municipio lucense de Navia de Suarna para impedir que las llamas se aproximen a la parroquia de Aira. Otro incendio fue el que se declaró a primera hora de la tarde de ayer en el municipio coruñés de Monfero, si bien horas después se encuentra controlado, aunque no extinguido. El Gobierno de Aragón da por controlados los dos incendios que ayer se produjeron en el término municipal de Mequinenza. Según fuentes del gobierno aragonés, las hectáreas quemadas se estima que son unas 250, no llegando a las 20 hectáreas en el caso del frente sur del incendio originado en Cataluña. Los incendios forestales han arrasado más de 36.000 hectáreas desde que comenzó el mes de agosto, una cantidad superior al total de superficie quemada durante los siete primeros meses del presente año, según se desprende de las estimaciones realizadas por las comunidades autónomas y el Ministerio de Medio Ambiente, que cifra en unas 27.000 las hectáreas afectadas en los seis primeros días de agosto. Si bien durante la semana pasada fue Extremadura la comunidad más afectada por las llamas, los incendios registrados desde el fin de semana en Cataluña han arrasado hasta hoy casi 7.000 hectáreas. En concreto, los incendios de Sant Llorenç y de Gallifa, habían arrasado hasta el día de ayer unas 4.500 hectáreas.