Sanidad cifra en cien los muertos por la ola de calor que ha afectado a España

? Un total de 100 personas fallecieron debido a la ola de calor que azotó España las últimas semanas, según datos oficiales facilitados hasta ayer al Ministerio de Sanidad y Consumo por las comunidades autónomas. De estas 100 muertes, registradas durante las últimas siete semanas, 46 se deben a «golpes de calor» y las 54 restantes al agravamiento de patologías previas debido a las altas temperaturas, según informó el Ministerio de Sanidad. Según estos datos, algunos de los cuales estaban a día de ayer pendientes de confirmación, las comunidades más afectadas por las elevadas temperaturas sufridas este verano, sobre todo durante las dos primeras semanas de agosto, han sido Andalucía, con 29 muertos (14 por golpe de calor y 15 por agravamiento de enfermedades) y Madrid, con 27 óbitos (8 por golpe de calor y 19 por agravamiento). Otra de las comunidades donde las altas temperaturas tuvieron mayores efectos en la salud fue Castilla y León, con 13 fallecimientos (2 por «calor excesivo derivado de condiciones climáticas» y 11 debido al agravamiento de patologías); seguida de Extremadura (7, todos ellos por golpe de calor); y Aragón (7, todos ellos por agravamiento de sus enfermedades). Asimismo, las autoridades de Castilla-La Mancha han contabilizado 4 óbitos, todos por golpe de calor; mientras que en País Vasco y Comunidad Valenciana perdieron la vida 3 personas en cada una debido a la misma patología. En Murcia también fallecieron 3 pacientes, aunque dos de ellos ya sufrían enfermedades con antelación a la llegada de la ola de calor. Por último, las comunidades de Cataluña, Galicia, Cantabria y Navarra registraron un fallecimiento cada una, en todos los casos debido a un golpe de calor. En Asturias, La Rioja, Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla no había confirmados a día de ayer decesos relacionados con el calor. La ola de calor en Francia Francia registró en las tres primeras semanas de agosto 10.400 muertes más que en periodos similares de años anteriores, según una proyección efectuada por las Pompas Fúnebres Generales (PFG) hecha pública ayer. El periodo corresponde a la canícula que azotó el país a comienzos de agosto y persistió durante dos semanas. Las PFG, que abarcan el 25% del mercado funerario francés, estiman igualmente que la diferencia de todo el mes de agosto con respecto al año pasado podría llegar a los 13.600 fallecimientos, 3.400 de ellos en la región de París. Esas cifras duplican las estimaciones del Gobierno galo, que el lunes consideró «posible» la «hipótesis» de 5.000 muertos a consecuencia de las temperaturas extremas, que este año alcanzaron los 40º centígrados, y reconoció fallos en los procedimientos de alerta de los servicios sanitarios del país. «Se ha mencionado la cifra de 5.000 fallecimientos. Es una hipótesis, plausible, pero sólo una hipótesis», reconoció el ministro de la Salud, Juan-François Mattei, quien subrayó que las cifras «definitivas e indistutibles» no se conoceran hasta que pasen varias semanas. El ministro de la Salud señaló que «sólo un estudio científico», que realiza actualmente el Instituto Nacional de Atención Sanitaria, «permitirá dar datos fiables» sobre los muertos por la canícula.