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El Ministerio pretende capacitar a los maestros para mejorar la aplicación de la Ley de Calidad

Educación pondrá en marcha un plan para formar al profesorado

El entrenamiento servirá para dar a cada alumno una atención personalizada

Los profesores estarán mejor preparados para afrontar la nueva ley de la enseñanza

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a. p. | madrid
León

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En paralelo a la entrada en vigor de la Ley de Calidad en este curso académico, el Ministerio de Educación pondrá en marcha un plan de formación del profesorado con el objetivo de preparar a los docentes españoles «para los nuevos retos del sistema educativo». La ministra Pilar del Castillo informó ayer al Consejo de Ministros sobre el arranque del curso 2003-2004 en distintas Comunidades Autónomas e hizo balance de las reformas acometidas por el ejecutivo en materia educativa en la presente legislatura. El nuevo plan tendrá un vigencia de cinco años, los mismos que necesitará la Ley de Calidad para su plena implantación en todo el sistema español de enseñanza, y estará dotado con un presupuesto específico de 10 millones de euros. De momento el citado plan no pasa de ser un esbozo, aunque Del Castillo subrayó que pretende facilitar a los docentes «elementos de formación adicional» precisos para enfrentarse con garantías a las exigencias de una educación de calidad. Se entrenará al profesorado en las técnicas didácticas para el estímulo y la atención personalizada a los alumnos; en el tratamiento de cuestiones derivadas de la presencia creciente de inmigrantes en las aulas; y en el manejo de situaciones de conflicto y dificultades de convivencia en las aulas. Se trata así de reconocer y reforzar el «protagonismo real» del profesorado como pilar básico del sistema educativo, señaló la ministra tras la reunión del Gabinete. Titulos profesionales El Consejo de Ministros aprobó además la aplicación en España de la directiva comunitaria sobre reconocimiento profesional de los títulos de los países miembros de la UE. Esta directiva consagra la libertad de establecimiento y la libre prestación de servicios en todo el territorio de la Unión para favorecer la movilidad de los trabajadores europeos. Con su transposición se introduce el concepto de «formación regulada» para el reconocimiento de títulos y diplomas profesionales de menos de tres años de formación post-secundaria.