La explosión de la biodiversidad

Para que un proyecto medioambiental tenga un impacto duradero y beneficioso, tiene que pasar tiempo. En un mundo cada vez más consciente de la necesidad de conservar lo que tenemos, es esencial que hagamos planes para salvar nuestro planeta, pero sabiendo que su resultado no se ve de la noche a la mañana. Esto, que hasta ahora se consideraba prácticamente un axioma, parece que va a dejar de serlo, y, si no, espere a que le expliquemos el siguiente caso. En seis pueblos de Inglaterra se ha puesto en marcha un plan fascinante que puede dar la vuelta a esa idea, pues demuestra que en solo un año se puede convertir un terreno agrícola en un hábitat de gran biodiversidad. Los primeros resultados del proyecto Buzz han sorprendido incluso a sus propios promotores, científicos y ecologistas. En un año, los hábitats creados alrededor de diversos campos han visto proliferar todo tipo de especies. En los seis experimentos se ha pretendido reproducir diversos habitats: grama, brezal, una zona de regeneración natural, césped con gran cantidad de flores, terreno especial para leguminosas y plantas que sirvan de alimento para pájaros. En cada uno de ellos se ha comparado la existencia y actividad de los invertebrados con los terrenos cultivados de los alrededores, con sorprendentes resultados: en los terrenos estudiados se han observado 38 veces más pájaros que en los cultivados, 13 veces más mariposas, cuatro veces más arañas y gusanos y el doble de escarabajos. Y lo más sorprendente de todo, en los nuevos hábitats se han contado 3.130 moscardones y sólo uno en los terrenos cultivados. Se espera que en los próximos años esas diferencias sean aún más marcadas. Marek Nowakowski, de la empresa Farmed Environment Company (FEC), encargada del proyecto, ha dicho: «Los resultados han sido asombrosos. Un hábitat situado en un lugar bien elegido y después bien gestionado, puede dar muy buenos resultados en el desarrollo de la biodiversidad y el proyecto Buzz lo ha demostrado. Lo que da a este trabajo verdadera dimensión científica y credibilidad es que los resultados han sido evaluados por un organismo independiente, el Centre for Ecology and Hydrology». Aspecto educativo Como una parte muy importante del proyecto es su aspecto educativo, los seis lugares experimentales están abiertos a todos los agricultores que quieran aprender a crear nuevos hábitats. El profesor David Bellamy, asesor del proyecto, ha declarado: «Como el ave fénix renace de sus cenizas, en los 12 primeros meses del proyecto Buzz hemos visto cómo estallaba la biodiversidad. Este proyecto es muy buena noticia para la agricultura, y por eso tenemos que pregonarlo, decir que se puede aumentar la cantidad y variedad de especies salvajes. Si se financia y se vende, puede ser la próxima revolución agraria en la que los agricultores devuelvan la vida salvaje a su anterior esplendor». En un solo año se puede convertir un terreno que antes era agrícola en un hábitat con gran diversidad de especies