Vivir hasta los 140 años
Los neurólogos investigan la prolongación del ciclo vital con el consiguiente retraso del desgaste cerebral para garantizar una vida de calidad a pesar del envejecimiento fisiológico
Prolongar la existencia de cada ser humano hasta los 140 años y retrasar el desgaste cerebral para garantizar una vida de calidad a pesar del envejecimiento fisiológico es el objetivo de las investigaciones que se desarrollaron ayer en el ámbito de la estimulación y protección neuronal. «Una persona con las habilidades manuales mermadas por la edad aunque plena en cuanto a capacidad neuronal puede conducir perfectamente un automóvil por muchos años que tenga», explicó a Efe el director de uno de los grupos de investigación de Instituto Andaluz de Biotecnología -con sede en Málaga-, José López-Barneo. La actividad que coordina este catedrático en Fisiología de la Universidad de Sevilla persigue frenar la degeneración neuronal ligada a la vejez y a enfermedades como el Parkinson o el Alzheimer mediante el autotrasplante en el paciente de células capaces de restablecer su función de transmisores de impulsos nerviosos. Los médicos participantes en esta investigación han descubierto que el trasplante en el cerebro del enfermo de células extraídas de su propio cuerpo carotídeo, situado en el cuello y caracterizado por un alto nivel de dopamina y factores neutróficos, es capaz de estimular la actividad intelectual menguada. Sin embargo, aunque este experimento ha sido tratado con éxito en roedores y monos, la eficacia técnica del proceso ha resultado mucho menor con humanos «debido fundamentalmente a que, al tratarse de un autotrasplante, el cuerpo carotídeo de los enfermos y ancianos está también desgastado, lo que no ocurre con animales jóvenes». La solución a este problema, según López-Barneo, pasa por el desarrollo «in vitro» de células madre adultas capaces de generar un cuerpo carotídeo nuevo, ya que, aunque sería posible trasplantar tejidos de individuos jóvenes a viejos, podrían darse problemas de rechazo en mayor grado que en el simple trasplante de órganos. El también jefe del Servicio de Investigación del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla anunció que su grupo ya trabaja con células madre y que la aplicación de estas técnicas «no debería suponer problema alguno de carácter moral o conceptual, el único freno lo imponen las tecnologías, que funcionan aún a nivel experimental». El equipo de investigación desarrolla una segunda línea de actuación dirigida a la prevención de la degeneración neuronal y cuyo objetivo es conocer el motivo por el que mueren las células «y por qué unas células mueren antes que otras», para lo que utilizan animales modificados.