| Visto y oído |
Frutos de todas las huertas
Cada huerta da sus frutos. La de la educación una sociedad mejor formada, con más cultura, con más argumentos, con más peso y más avanzada. La familiar, algún sinsabor, pero sobretodo amor, cariño y realización: la ilusión de ver crecer a hijos y nietos es sin duda una de las más grandes satisfacciones. Lo primero lo buscan sembrando entre el alumnado del colegio de la Palomera, para formar personas que sepan decir no a la droga. Lo segundo lo han encontrado en Santovenia del Monte -un ejemplo más de lo que ocurre cada día en multitud de hogares-, donde hay un nuevo retoño en casa. Niños hortelanos ?yer tuvo lugar una nueva cita de las jornadas En la huerta con mis amigos , que organiza el plan municipal de León ciudad contra las drogas. De cinco a seis de la tarde, los chavales de tercero y cuarto del colegio de la Palomera pudieron disfrutar en el propio centro de diversas actividades encaminadas a «pensar por sí mismos y actuar de manera independiente», así como a aprender relaciones sociales a fin de que en el futuro cuenten con más conocimientos y menos posibilidades de entrar en contacto con la droga. Se trata de una de las múltiples actividades, sordas pero fundamentales, del plan municipal contra la drogodependencia, de la capital leonesa, que ha apostado por sembrar entre los más jóvenes para recoger los frutos de la huerta virtual de la vida cuando lleguen a la edad adulta. El objetivo, una vida sana, independiente y libre de ataduras y malos hábitos sociales y personales en todos los ámbitos. Bienvenida a la vida Cada día es menos habitual que nazca un niño en la multitud de pequeños pueblos de la provincia leonesa. Por eso, cuando sí ocurre la feliz noticia es todo un acontecimiento. Es el caso de Marta Álvarez Arias, que acaba de ver la luz y que junto a sus hermanos Ana y Luis conforma una nueva «familia numerosa». Residen en Santovenia del Monte, desde donde han hecho llegar la foto de los tres retoños junto a su madre. Los vecinos quieren felicitar de este modo a sus padres y abuelos, dándoles su más sincera enhorabuena. A ver si cunde el ejemplo.