Muere un matrimonio al quedar sepultada sucasa por las lluvias

Una mujer de 68 años y su marido, de 70, fallecieron el domingo de madrugada en la localidad de Bruscabero, en el concejo asturiano de Salas, al quedar sepultada su casa como consecuencia de un gran desprendimiento de tierras que arrastró y cubrió la vivienda que se encontraba en la ladera de un monte. El desprendimiento se produjo sobre las dos de la madrugada en un momento en el que azotaba la zona un fuerte temporal de lluvia y viento. Piedad Cano y Joaquín Cano se encontraban en su domicilio, situado en la ladera del pico Aguión, a unos 60 kilómetros al occidente de Oviedo. El desprendimiento se produjo unos 40 metros ladera arriba del lugar que ocupaba la casa y una cuadra en la que el matrimonio guardaba una docena de vacas y que también quedó sepultada entre el enorme aluvión de toneladas de tierra que fue creciendo mientras arrasaba todo a su paso ladera abajo. Si bien el aviso a los servicios de emergencia fue dado por unos familiares de las víctimas sobre las cinco de madrugada, se supone que el desprendimiento se produjo hacia las dos. A esa hora, la mujer se encontraba hablando por teléfono con una hija suya cuando se cortó la comunicación de forma brusca, lo que hace suponer que fue el momento en el que se produjo la catástrofe. Hallazgo de los cadáveres Nada más producirse el aviso, se desplazaron al lugar equipo de bomberos de las localidades de Grado y La Morgal que no pudieron hacer otra cosa que constatar la magnitud del suceso. El perro de la casa fue la única señal de vida que encontraron al llegar. Fue a primera hora de la mañana cuando se iniciaron los trabajos de desescombro por parte de personal de Protección Civil, Bomberos, Guardia Civil, voluntarios y familiares de las víctimas, con el auxilio de una pala mecánica. A las tres y veinte minutos de la tarde hallaron el cadáver del varón. Dos horas más tarde apareció el cuerpo sin vida de la mujer. Este fue el suceso más grave en Asturias relacionado con un temporal de viento y agua que azotó esta comunidad con especial intensidad en la madrugada y la mañana de este domingo, ocasionando también algunas inundaciones de escasa gravedad en el tercio occidental del Principado, con fuertes crecidas de los ríos y algunos problemas en las comunicaciones por carretera. El 112 Asturias recibió ayer más de 7.000 llamadas ante los numerosos problemas de comunicación por las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias.