| Reportaje | Reciclar y reutilizar |
Materiales de construcción a partir de papel La fórmula óptima
Los residuos del papel reciclado se pueden convertir en ladrillos o en paneles utilizando ligantes de bajo coste como yeso y cemento
Un equipo de científicos dirigido por el profesor John McNicholas de la Universidad de Salford ha conseguido un método productivo de eliminar los residuos procedentes del reciclaje del papel, fabricando con ello materiales de construcción. McNicholas ha explicado que diez toneladas de residuos de papel reciclado más dos toneladas de agua pueden producir dos toneladas de yeso o arcilla. La eliminación de esos residuos ya está siendo un problema importante. En un país medio cada año se reciclan varios millones de toneladas de papel y esa cantidad está aumentando rápidamente debido a las nuevas normas. Algunas fábricas queman los residuos y tiran las cenizas mientras que otras los pueden tirar a vertederos. Pero ese tipo de eliminación es caro y antiecológico, añadió. El equipo de Salford ha encontrado una solución alternativa: convertir esos residuos en materiales de construcción como ladrillos o paneles, utilizando ligantes baratos como yeso y cemento. «Todas las fábricas que reciclan papel obtienen unos residuos formados por fibras cortas de celulosa y otras sustancias utilizadas en la fabricación de papel», añade el profesor McNicholas. Las páginas de las revistas de lujo contienen una gran parte de arcilla. Otros papeles brillantes pueden contener cal. Al reciclarlos, esos papeles producen cerca del 45 por 100 de fibras de celulosa y el resto es arcilla, con una pequeña proporción de cal. Los residuos de otras fábricas dedicadas al reciclaje pueden tener distinta composición, dependiendo del papel que reciclen y de la eficacia de sus procesos. Yeso y cemento Los ligantes y cargas son materiales baratos (cemento y yeso ya utilizado en la construcción). Los investigadores de la universidad de Salford han estudiado siete tipos de cemento y dos de yeso y han evaluado cuatro aditivos impermeabilizantes y cinco tipos de pintura, así como la posibilidad de mezclar los residuos de papel reciclado con otros como lodos graníticos y restos de paneles de yeso triturados. En el laboratorio se han mezclado todos estos residuos, se han escurrido, curado y secado. Con ellos se han fabricado paneles de cemento que se han serrado para conocer su resistencia, rigidez y otras propiedades. Con los resultados de estas pruebas se ha creado una base de datos para identificar la fórmula óptima y la densidad de los paneles para conseguir una determinada resistencia y rigidez, incorporando los límites de estabilidad dimensional y otros datos estructurales suplementarios. Así se ha creado también una base de datos de ladrillos y paneles para interiores. El proyecto ya está listo para su explotación comercial y la universidad ha creado un servicio de asesoría para constructores y fabricantes. En conjunto se han desarrollado distintos materiales que se pueden adaptar para satisfacer determinadas necesidades. Todos ellos tienen buenas propiedades de trabajo y son fáciles de serrar, taladrar, pegar y permiten clavar clavos. Pueden sustituir a la madera en algunas aplicaciones, por ejemplo como revestimiento de estructuras o para fabricar determinado tipo de muebles. En esta última aplicación, la superficie de los paneles se puede estampar con un método económico para conseguir efectos decorativos. El profesor McNicholas ha añadido: «Como material homogéneo y sin fallas, también se puede utilizar para construir maquetas y prototipos sustituyendo a los materiales mucho más caros que se utilizan actualmente para estos usos».