Los seguidores de Bush se alegran, conscientes de que una victoria en Ohio, impediría la entrada de Kerry en la Casa Blanca.
Un grupo de seguidores demócratas aguardan impacientes en Boston a que se conoxcan los resultados.
El presidente Bush pasó la noche en la Casa Blanca, en contra de lo acostumbrado en las veladas electorales. En ésta iba a salir reelegido tras vencer a Kerry por 3.5 millones de votos.
El candidato demócrata optó por escapar de los fotógrafos y envió a su segundo John Edwards a lidiar con los reporteros.
Dicho y hecho, así se plantó el segundo de a bordo de Kerry ante centenares de seguidores en Boston.
En Miami, los simpatizantes republicanos de la comunidad hispana, eligieron un hotel para aguardar por los resultados, después de conocerse la victoria de Bush en el estado clave de Florida.
Chicago se echó a la calle para apoyar al candidato negro demócrata Barak Obama, que apareció en la noche electoral acompañado de su hija de seis años.
Arnold Schwarzenegger no quiso perderse la fiesta de la victoria electoral celebrada en Beverly Hills.
Mientras algunos miembros del Gobierno se reunieron en un hotel de Madrid para seguir la noche electoral, cientos de simpatizantes apoyaron la candidatura demócrata en otro café de la capital.
Dos simpatizantes demócratas pasan la noche en vela en Suiza.
El Harry"s bar es ya la referencia parisiense para seguir las noches electorales del otro lado del charco.
En Londres, el tío Sam, se ha paseado por numerosos puntos de la ciudad. En la imagen, saluda al secretario británico de defensa.