Una granadina fallece apuñalada a manos de su ex compañero

Guadix expresó ayer su dolor por la muerte, a manos de su ex compañero sentimental, de Ana López Ariza, primero durante una concentración y después en su entierro, al que acudieron más de 300 personas, mientras que su familia aseguró que sufrió malos tratos y amenazas durante años. El presunto autor del crimen, que se entregó poco después, prestó ayer declaración en la Comandancia de la Guardia Civil y fuentes del cuerpo informaron a Efe de que se espera que hoy pase a disposición judicial, una vez se haya interrogado a varios posibles testigos y finalice la instrucción de diligencias. Los primeros datos de la investigación apuntan que el ex compañero de la víctima, Francisco M.L., la interceptó en la carretera de Guadix-Purullena cuando se encontraba en un vehículo en compañía de otra persona, aunque la familia de la fallecida ofreció ayer otra versión. Los antecedentes Según explicó a Efe su prima y portavoz de la familia, Ana Ariza, «este crimen no fue por un arrebato de celos» ya que tanto la víctima como sus hijos sufrieron «maltratos y amenazas» y, aunque lo contó a sus familiares y advirtió a sus padres de que «moriría antes que ellos», no lo llegó a denunciar «por las amenazas que recibía de él». Reveló que hace tres semanas el ex compañero sentimental de Ana López «intentó estrangularla, dejándole una marca en el cuello, y aún así no lo denunció e incluso dijo a su familia que las señales se las había causado su hijo menor». Añadió que «no hay terceros implicados» porque su prima «no salía actualmente con nadie» y que el agresor la recogió en el domicilio de sus padres a las 17.00 horas «y el ataque no fue producto de un ataque de celos, ya que iba preparado para matarla con un arma blanca». A la concentración, convocada por el Ayuntamiento de Guadix, acudió más de un centenar de personas, entre ellos familiares y amigos de la víctima, la corporación municipal al completo, el delegado provincial de Justicia, José Luis Hernández, la coordinadora provincial del Instituto de la Mujer, Francisca Fuillerat Pérez, o el director del Instituto de Medicina Legal de Granada, Miguel Lorente. El alcalde de Guadix condenó el crimen y dijo que «que estamos en unos tiempos en los que no se puede permitir este tipo de actos de violencia y crimen contra las mujeres», y recordó que son ya doce las mujeres muertas a manos de sus parejas en lo que va de año. Al funeral, celebrado en la iglesia San Miguel de Guadix, asistieron más de 300 personas y en el cementerio municipal familiares y amigos expresaron su dolor. Ana López, de 39 años y residente en Guadix, trabajaba en un locutorio y era muy conocida en la localidad porque durante mucho tiempo fue dependienta en la frutería de un supermercado, mientras que su presunto agresor, Francisco M.L., de 45 años, trabajaba como pinchadiscos en una discoteca. La pareja, que nunca llegó a convivir, se había separado recientemente y tenía dos hijos de 11 y 4 años que vivían junto a su madre en casa de los padres de ésta., en el barrio.