El ADN salva a un condenado a muerte en Luisiana
Un juez del estado de Luisiana ordenó ayer que un condenado a muerte sea sometido a un nuevo juicio, después de que sus abogados alegasen que las pruebas de ADN a que fue sometido lo libran de culpa. La orden fue emitida por el juez Henry Sullivan después de que el fiscal Paul Connick anunciara que aceptaría un nuevo juicio si las pruebas genéticas ponían en duda el veredicto. Durante más de un año los abogados de Ryan Matthews habían asegurado que el ADN encontrado en una máscara, una camisa y un guante eran de un hombre que está actualmente en prisión, no de su cliente. Matthews fue condenado a muerte en 1999 tras ser declarado culpable de asesinar a balazos a un hombre para robarle en su comercio.