Un informe exige que trabajar drogado sea causa de despido

El informe del grupo de expertos sobre el cannabis propone elevar las penas de cárcel por tráfico de esta droga ilegal, generalizar los controles obligatorios del consumo de esa sustancia en determinados sectores laborales y reforzar la inspección de las llamadas grow shops . El documento contiene una análisis de situación y propuestas de actuación en los ámbitos laboral, legal y preventivo, elaboradas por una veintena de juristas, científicos y clínicos, quienes fueron convocados por el anterior equipo del Ministerio del Interior y concluyeron su trabajo en marzo pasado. Entre las sugerencias figura la de «extender la aplicación -de no hacerse ahora- y agravar las sanciones por la permisividad del consumo de cannabis y otras drogas, o por falta de diligencia para impedirlo, a los responsables de centros de enseñanza, de ocio u otros locales o establecimientos públicos a los que acudan menores». En lo laboral, se aboga por extender los controles preventivos de consumo de cannabis y otras drogas a los sectores donde hay más riesgo para la seguridad de trabajadores o terceras personas (empleados de transporte público, personas que manejan maquinaria pesada ...). Además pide revisar la causa de despido prevista en el Estatuto de los Trabajadores, que ahora sólo considera el consumo habitual (toxicomanía) y cuando repercute negativamente en el trabajo. Con la modificación pasaría a ser causa de despido la realización de la actividad laboral bajo influencia de cualquier estupefaciente o sustancia psicotrópica, sea habitual u ocasionalmente, y cuando incida en el ejercicio profesional. Además, aboga por modificar la pena prevista para el tráfico de sustancias calificadas como no causantes de grave daño a la salud, «que se elevaría de 1 a 3 años de privación de libertad a un intervalo de 2 a 5 años». El texto pide una nueva redacción del artículo 368 del Código Penal, que exponga que todas las drogas resultan nocivas.