Los visitantes podrán llevar comida y bebida al Fórum, pero no fiambreras

La organización del Fórum Universal de las Culturas Barcelona-2004 ha dado marcha atrás a sus planteamientos iniciales y permitirá la entrada de comida y de bebida en el recinto a partir del próximo sábado, según anunció el director general del evento, Jordi Oliveras. La rectificación es fruto de las protestas de los primeros visitantes del Fórum, que sufrían el elevado precio del servicio de restauración que se ofrece dentro del recinto, y de las quejas presentadas por las organizaciones de consumidores. Estas asociaciones llegaron a comparar las reglas del evento cultural con las de un parque temático, donde es norma registrar las bolsas buscando bebidas o alimentos. Tras las protestas, la organización permitirá la entrada de alimentos y de bebida, salvo botellas de vidrio y bebidas de alcohol, durante los próximo 15 días y si la medida diera resultado se adoptaría hasta la clausura de la cita. Oliveras argumentó que la prohibición de no dejar pasar alimentos no se debía a cuestiones comerciales, sino al deseo de que los participantes también disfrutarán de la diversidad culinaria. El director general del Fórum afirmó que se priorizará «el bocadillo y no la fiambrera», para que el recinto «no se convierta en una zona de picnic». Esta marcha atrás tendrá un elevado coste para el Fórum, que deberá renegociar con los operadores de restauración las condiciones de sus contratos. Oliveras aseguró que no existe ninguna cláusula de indemnización en los contratos firmados con los operadores, entre ellos Husa, aunque desveló que son acuerdos «complejos» basados en una proyección mínima de 5 millones de visitantes, que incluían la prohibición de entrar comida y bebida al recinto.