Los nuevos cañones de luz apuntan a la Puerta del Sol, las fuentes de Cibeles, Neptuno y Apolo, el Palacio de Comunicaciones, el Museo del Prado y la Biblioteca Nacional.
La fuente de la Cibeles también se ha apuntado a la nueva iluminación para la que se ha contado con más de mil proyectores y una potencia de un millón y medio de vatios.
La decoración nocturna de los puntos más emblemáticos por los que pasará la comitiva real se mantendrá durante los días previos a la boda y hasta el domingo posterior.
Para la iluminación se ha contado con los equipos más avanzados.
El Ayuntamiento ha instalado así proyectores que mezclan los colores y pueden imprimir texturas e imágenes litográficas a las fachadas.
La decoración se inspira en el atardecer madrileño, con tonos cambiantes que van desde el rosa o el morado hasta el amarillo o el blanco.