Massachusetts es el primer estado que deja casarse a las parejas gais
Cientos de parejas del mismo sexo esperaban ayer pacientemente su turno para casarse en Massachusetts, el primer estado de EE.UU. en permitir el matrimonio entre homosexuales. Las parejas homosexuales de Cambridge (Massachusetts), una de las ciudades más progresistas de Estados Unidos, están de fiesta desde la medianoche del domingo, cuando los funcionarios abrieron las puertas del ayuntamiento y los novios y novias comenzaron a rellenar los correspondientes formularios. Pocas horas después, los jueces de esta localidad comenzaron a expedir documentos que permitirán a las parejas casarse de forma inmediata, sin tener que esperar los tres días que hasta ahora eran de rigor. En primera fila se encontraban las siete parejas que llevaron el asunto ante los jueces, hace tres años, y que consiguieron que el máximo tribunal de este estado declarase la legalidad de estas uniones, pese a la avalancha de críticas por parte de grupos conservadores y católicos. Las dos mujeres que iniciaron la querella colectiva, Julie y Hillary Goodridge, -que adoptaron el mismo apellido legal en 1995- iniciaron ayer los trámites y tienen previsto casarse esta tarde en una ceremonia en Boston, la capital del estado. Las críticas Mientras tanto, los que se oponen a estos matrimonios se mantuvieron distantes, salvo un pequeño grupo de activistas que apareció el domingo por la noche en Cambridge portando carteles con eslóganes como «Dios odia a los homosexuales». Massachusetts sigue los pasos de San Francisco, la ciudad californiana «rebelde» que concedió licencias de matrimonio a más de 4.000 parejas homosexuales a partir de febrero.