Atracó en la bahía de Algeciras el pasado 9 de julio, el motivo de su visita es un viaje recreativo para su tripulación.
Una veintena personas del colectivo Ecologistas en Acción en la comarca del Campo de Gibraltar (Cádiz) se manifestaron en contra de la estancia del Tireless en aguas gibraltareñas.
Algunos miembros de la asociación Ecologistas en Acción colocan una bandera negra como protesta en la verja que sirve como límite entre las aguas españolas y gibraltareñas.
Un submarino nuclear averiado llega a la bahía de Algeciras. La Royal Navy no se ha atrevido a remolcarlo hasta las islas británicas. Este es el comienzo de una visita que duraría casi un año.
El Reino Unido se escudaba en el secreto militar. Finalmente permiten la entrada de técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) aunque la inspeccion se quedó en una simple "visita" de cortesía.
Fueron constantes las protestas de la oposición, alcaldes de la zona y las autoridades de Gibraltar. Se olvidaron las rivalidades y los gibraltareños se movilizaron y organizaron para que el submarino fuese trasladado.
Las reparaciones no avanzan. Se forma la plataforma contra el Tireless, llegan incluso a declararse en huelga de hambre. Acusan a los Gobiernos español y británico de anteponer los intereses del Reino Unido a la seguridad de la población.
Cuatro lanchas de la organización se aproximaron al Tireless consigueron subir a la cubierta del submarino nuclear, en donde desplegaron pancartas en contra de la existencia de este tipo de naves.
Numerosas personas exigían al Gobierno una actuación inmediata, que la información fuera clara y que se tomaran las medidas oportunas para que el submarino abandonara de forma inmediata la bahía de Algeciras por la seguridad de los ciudadanos.
El 20 de Enero del 2001 se manifestaron por las calles de Algeciras cerca de 80.000 personas en contra de la estancia en Gibraltar del submarino britanico.
El 7 de Mayo del 2001, el 'Tireless', abandona Gibraltar. Varias decenas de personas se reunieron en el muelle para despedirlo, con banderas inglesas, champan y una pacarta deseandole buena suerte en el arranque.
La avería había sido reparada. Dos remolcadores empujaron al submarino que salió con rumbo desconocido, impulsado por su propia energía.
Después de la polémica con su anterior visita, el Tireless ha vuelto. Se encuentra atracado en el muelle de la base naval de Gibraltar en donde va a permanecer varios días por una visita rutinaria.