El Gobierno iguala a mujeres e hijos en la ley contra violencia doméstica

El anteproyecto de ley integral contra la violencia sobre la mujer protegerá también a los hijos, según adelantó ayer el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, en declaraciones realizadas en un programa de televisión. El Gobierno se muestra dispuesto a incorporar sugerencias y recomendaciones de los órganos consultivos, incluido el muy crítico Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), para mejorar el texto que será aprobado el viernes por el Consejo de Ministros. Aunque ese articulado contemplará ya alguna modificación inicial, el grueso de los posibles retoques a la norma quedará reservado para su tramitación parlamentaria, que durante seis meses situará en el epicentro legislativo el grave problema (32 asesinadas en este 2004) de los malos tratos. El titular del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales ya se había declarado «abierto a todo tipo de sugerencias» al explicar ayer el contenido del anteproyecto de ley a los grupos parlamentarios. También su colega de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, mencionó la posibilidad de añadir al texto «alguna observación» relacionada con «la posición y defensa de los menores» y con la «proporcionalidad general en el tratamiento de las penas y la consideración agravante» de la violencia machista. Caldera concretó aún más esa actitud al subrayar en el programa de Antena 3 Sabor a ti que «el niño es un bien esencial a proteger» y que el anteproyecto de ley reforzará la protección de los hijos, con la misma protección que la de las mujeres. El ministro, que citó la atención psicológica y las ayudas sociales o laborales, recalcó que «en el espíritu del anteproyecto ya está la protección del menor, que ahora puede ser más claro y que extiende a los hijos las medidas para las madres». El titular de Trabajo y Asuntos Sociales se mostró crítico con los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que descalificaron el texto gubernamental y tacharon de inconstitucional algunos apartados. «En el fondo piensan que no debe haber una ley para prevenir la violencia contra las mujeres», apostilló. En la sede de su departamento, donde Caldera recibió a una representación casi completa de todo el arco parlamentario, el mensaje fue claro: el Ministerio y el Gobierno están convencidos de que su anteproyecto de ley no es inconstitucional. Fuentes ministeriales prefirieron rebajar el perfil de las dudas provisionales expresadas el lunes por la comisión de estudios del Consejo General del Poder Judicial -«el informe no ha llegado aquí», precisaron-, que todavía deben ser revisadas el jueves por el Pleno del CGPJ antes de que su preceptivo informe sea definitivo. Además, remacharon las fuentes del Ministerio, el encuentro con los grupos parlamentarios no registró «ninguna intervención en contra de la necesidad de la ley». La máxima reserva mostrada ayer por los portavoces convocados por Caldera, que esquivaron la numerosa presencia de medios informativos en la sede de Trabajo y Asuntos Sociales, indica que los partidos prefieren guardar sus cartas para el momento en que el texto gubernamental se apruebe e inicie su recorrido legislativo. El propio Ministerio insiste en situar el dictamen consultivo del CGPJ, cuya mayoría conservadora ha elevado el tono crítico frente al proyecto del Gobierno, al mismo nivel que los igualmente preceptivos informes del Consejo de Estado -también pendiente de llegar-, el Consejo Económico y Social y el Consejo Escolar del Estado. «En el fondo piensan que no debe haber una ley para prevenir la violencia contra las mujeres» JESÚS CALDERA Ministro de Asuntos Sociales