Cosas de aquí | Hospital de animales
León salva a una tortuga boba
La Facultad de Veterinaria logra recuperar una «caretta caretta» que apareció herida en la costa gallega, al tiempo que cura a una hembra de aguilucho cenizo y trata de aparearla
Lleva más de un año en tratamiento. Ahora acaba de recibir el alta médica del departamento de Medicina Animal de la Universidad de León. Es un ejemplar de tortuga caretta caretta, más conocida por «tortuga boba», que apareció herida en la playa coruñesa de Covas de Ferrol y fue enviada a León desde el Centro de Recuperación de Mamíferos Marinos de Vigo. En aguas de Galicia, donde es común aunque poco abundante, se encuentran ejemplares de origen americano. En general son individuos de pequeño tamaño los que llegan a varar en estas costas, en ocasiones debido a las bajas temperaturas del agua. Alicia Ester Serantes, profesora del departamento de Patología Animal de la Universidad de León, afirma que la tortuga llegó a León para una última revisión antes de ser liberada.«Afortunadamente, está mucho mejor, más grande y hermosa que cuando llegó por primera vez y completamente recuperada del neumotórax del que fue tratada». Novios para un águila La recuperación de la tortuga boba no es un hecho aislado. La Facultad de Veterinaria se ha convertido en un auténtico hospital para animales, en muchos casos, terminales. Ejemplares de especies poco frecuentes o en peligro de extinción, como una joven hembra de aguilucho cenizo, atendida de una fractura. Una rapaz única a la que han incluido en un programa de reproducción. «Ahora mismo está conociendo a sus posibles novios en un centro de cría». Delfines en León La clínica de Veterinaria también ha atendido recientemente a una hembra de cuco herida, un pollo de cigüeña que había ingerido una gran cantidad de cables y plásticos, lechuzas, búhos, milanos, un ejemplar de corzo y águilas ratoneras y calzadas. El Servicio de Cirugía y Diagnóstico por Imagen del departamento de Patología Animal que dirige José Manuel Gonzalo Cordero se ocupa en ocasiones de averiguar las patologías que ocasionan la muerte de algunos animales, como cuatro delfines hallados en la costa gallega y que han sido estudiados en los últimos días. No son los pacientes habituales que pasan por la clínica de la Facultad de Veterinaria, más acostumbrada a curar especies del entorno cercano, como rapaces, corzos, reptiles, tejones y osos. Serantes afirma que, en el caso de los reptiles, en un principio sólo llegaban a su «consulta» tortugas, pero ahora «la gente sabe que todos están protegidos y también nos traen serpientes y lagartos».