La ONU advierte que el éxito de la lucha antisida pasa por la igualdad de la mujer

Cualquier acción contra el VIH que no enfrente la discriminación de la mujer está destinada al fracaso, advirtió ayer un informe conjunto de tres organismos de las Naciones Unidas presentado en la XV conferencia internacional del sida. El acelerado avance de la proporción femenina entre las personas infectadas (el 48% ya, cuando en 1985 era el 35% y en 1997 el 41%) es aún más espectacular en las edades juveniles, ya que las chicas representan más del 60% de los seropositivos de 15-24 años y tienen 1,6 probabilidades más de contraer el virus de inmunodeficiencia adquirida que los chicos. El escenario femenino de la pandemia se sitúa casi exclusivamente en el mundo pobre, donde se concentra el 98% de las mujeres seropositivas, por encima incluso del ya abrumador 94% de los casos masculinos. Es la demostración evidente de que el «sida femenino» es una bomba destructiva de efectos retardados, sobre todo porque la mujer es el agente clave del cuidado sanitario, la socialización y educación de los hijos e, incluso, la comunicación en el ámbito familiar. «Sin estrategias dirigidas específicamente a ella, el impacto del VIH no se podrá aminorar», recalcó desde el Fondo de Población de la Onu Thoraya Ahmed Obaid. «El único camino son las acciones concretas para disminuir su vulnerabilidad», remachó Kathleen Cabrero desde Onusida. Seis países que se enfrentan a graves epidemias de sida firmaron un pacto que promueve los medicamentos a bajo precio. Tres de estos países (China, Tailandia y Brasil), son los mayores productores de «medicamentos piratas», los antirretrovirales genéricos. Los otros países que participan son Rusia, Nigeria y Ucrania. Este pacto tiene como objetivo cuidar a 10 millones de personas con tratamientos con un coste un 80% inferior al de los grandes laboratorios farmacéuticos occidentales.