La proporción de seropositivos tratados no ha mejorado en dos años

La XV Conferencia Internacional del Sida se cerró ayer con tono agridulce: desde la anterior cita de Barcelona-2002, el número de tratados se ha duplicado en el mundo pobre hasta alcanzar a 440.000 seropositivos, pero no ha mejorado la proporción de quienes reciben antirretrovirales y/o servicios preventivos respecto al total de infectados. El escaso 7% de personas necesitadas de terapia a quienes efectivamente les llega, ha sido el dato más repetido esta semana en Bangkok, donde los 17.000 delegados han escuchado severas críticas a la estrategia antisida «discriminatoria e interesada» de Estados Unidos y dramáticas advertencias sobre la expansión de la epidemia entre las mujeres y sobre el riesgo de una «explosión asiática» de la misma. Nelson Mandela, convertido en uno de los activistas antisida más populares del mundo, fue ayer el gran protagonista de una ceremonia de clausura en la que también participaron su esposa Graça Machel y la dirigente del partido gobernante indio Sonia Gandhi, cuyo país es ya el segundo del mundo en número de seropositivos. El ex presidente sudafrican se atrevió a pedir su «mejor regalo de cumpleaños» para el domingo: «Me encantaría ver renovado el compromiso de los líderes de todos los sectores sociales para una acción urgente y real contra el VIH».