Bueno, fácil y barato

Una familia puede ahorrarse cerca de 600 euros al año en alimentación con la lactancia materna, según estimaciones de la Asociación Española de Pediatría, que ha abierto una página en Internet para explicar los beneficios de una práctica que los especialistas desean se amplíe en España. El descenso de la lactancia natural es un problema de salud ya que las ventajas de ésta son nutricionales por ser de mayor calidad que las leches artificiales , también inmunológicas por proporcionar protección frente a enfermedades, y psico-emocionales, por el componente afectivo entre madre e hijo. Según la última encuesta nacional de salud, un 60,8% de las madres en España limitan la lactancia materna a sólo seis semanas, mientras que hay un 23,6% que dan de mamar a sus hijos durante seis meses. Los especialistas consideran que estas cifras son francamente mejorables. Unicef ha hecho recientemente un llamamiento mundial para la promoción de la lactancia materna y en este marco ha creado el programa «hospitales amigos de los niños». En España son una decena los hospitales adscritos a este programa que obliga al cumplimiento de 10 puntos centrados fundamentalmente en la promoción de la lactancia y la afectividad hacia los menores. En el marco de esta iniciativa, algunos hospitales españoles han elaborado protocolos en los que se recomienda incluso iniciar la lactancia en la sala de partos o tras la primera hora de vida del bebé. También se explica en estos protocolos que la lactancia materna debe ser a demanda, cuando lo pide el bebé, porque cada niño es distinto y porque el tiempo de las tomas es también muy variable según los bebés. Al niño le protege de enfermedades tales como catarros, bronquiolitis, neumonía, diarreas, otitis, meningitis, o de enfermedades futuras como asma, alergia, obesidad o la colitis ulcerosas y arteriosclerosis o infarto de miocardio en la edad adulta y favorece el desarrollo intelectual, según informó la Asociación Española de Pediatría en su página web. Los beneficios de la lactancia también se extienden a la madre, ya que las mujeres que amamantan pierden el peso ganado durante el embarazo más rápidamente y es más difícil que padezcan anemia tras el parto, también tienen menos riesgo de hipertensión y depresión postparto. La osteoporosis y los cánceres de mama y de ovario son menos frecuentes en aquellas mujeres que amamantaron a sus hijos. Desde otro punto de vista, y según señala el Comité de la Lactancia de la citada Asociación, la leche materna es un alimento ecológico puesto que no necesita fabricarse, envasarse ni transportarse con lo que se ahorra energía y se evita contaminación del medio ambiente. Debido a la menor incidencia de enfermedades, los niños amamantados ocasionan menos gasto a sus familias y a la sociedad en medicamentos y utilización de Servicios Sanitarios y originan menos pérdidas por absentismo laboral de sus padres. El citado Comité indica además que cualquier mujer puede ser capaz de alimentar a su hijo exclusivamente con su leche y que la diferencia entre unos pechos grandes o pequeños, prácticamente, es la cantidad de grasa que contienen y no la cantidad de glándula productora de leche. El principal estímulo que induce la producción de la leche es la succión del niño, por lo tanto cuantas más veces se agarra el bebé al pecho de la madre y cuanto mejor se vacía éste, más leche se produce.