Una llama recuerda a las víctimas

Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue el encendido del pebetero del patio del Instituto de la Mujer a cargo de varios familiares de mujeres asesinadas. Esta llama permanecerá como homenaje a todas las víctimas de la violencia de género. Estaban la hermana de Esmeralda Clavería (23 años), quien fue asesinada junto a su madre (46 años) en marzo en Fuentes de Ebro (Zaragoza), a manos de su ex compañero sentimental; y la y la madre y una hija de 15 años de Fabiola Dolores González (32 años), quien murió en julio en Telde (Gran Canaria) acuchillada por su marido. La emoción embargaba también a las dos hermanas de Sandra Pinto (31 años), estrangulada por su compañero el 29 de agosto; y el hijo de 17 años de Jennifer Lara Castillo, quien perdió la vida junto a otros dos de sus hijos en Alcira (Valencia), cuando su ex esposo prendió fuego a la vivienda con ellos dentro el 30 de abril. Un manifiesto al que la actriz Charo López puso la voz hizo hincapié en que «es necesario que se vuelva impensable; que (el maltrato) no tenga nunca más sitio ni en nuestras mentes, ni en nuestros cuerpos, ni en nuestras vidas». El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, instó a enfrentarse al silencio para desenmascarar a los maltratadores.