No preocuparse

YO VOS nombré, yo vos dejo colocaos, no preocuparse, echaremos cable alargador al enchufe, se unta de grasa un decreto y vos quedáis empalmaos al rabo de la vaca, ese rabo que es la puerta de atrás, ya lo sé, pero al menos ya estáis cerca de la ubre y en dos años o tres ¡a mamar de fijo como todos!, no preocuparse, funcionarios por narices, puesto pasiempre, plaza vitalicia, el cuponazo de los viernes, pues si antes el enemigo colocó a trescientos, a ver si no vamos a tener derecho a otros tantos, pero nosotros no somos tan voraces y obsesivos en empalmar a propios, creemos en la corrección del gasto público y en la austeridazz reduciendo la zzifra a sesenta, medida ejemplar, ¡la quinta parte!, renunciando en favor del erario a los otros legítimos cuatro quintos, quinto levanta, tira de la manta, quinto quintón, el turuta es un cabrón, así que no preocuparse, habéis trabajado con entrega e ilusión, muchas veces por encima de horarios y cometidos porque creíais en otra forma de hacer las cosas y os entregásteis, vaya si os entregásteis, entregaos del todo, y estas cosas la patria ha de considerarlas objetivamente y corresponder en su medida de la misma forma que se ha venido haciendo con toda la tropa de enchufaos de gobiernos anteriores, que mira que se pasaron, no preocuparse, pues, vuestra enriquecedora aportación a la metrópoli la habéis hecho indispensable y diría que impagable, de utilidad pública, que nadie os haga creer que la prórroga de vuestro empleo es favor de amigo o de señorito de partido, sino justicia pura, obligado reconocimiento y compromiso público para no privar a la ciudadanía de vuestra enorme ayuda en sus conquistas sociales, conquistas culturales, tecnológicas, de implantación de tejido industrial, de regeneración urbana, de fiesta, de gastronomía, de arte... perdón, creí que alguien había arrimado un micrófono de la tele, ¿no hay tele?... pues... yo vos coloqué y yo vos garantizo que haré todo lo posible para que a san Juan, que es el patrono del agua bendita y del agua de peruco, no se le baje el dedo, tieso dedo, el dedo que vos nombró, santísimo dedo... y será un infame y un miserable quien intente discutir vuestros derechos, yo vos defenderé, resistiré luchando por los ciudadanos, por una metrópoli moderna y biotecnológica, así que tranquilos, no preocuparse.