Cuando el lunes se hace viernes

Tanto reloj, tanto biorritmo, y luego resulta que el calendario es el primero que vuelve loco al personal. ¿Qué es es hoy, viernes? (porque pasado mañana es festivo). ¿Domingo? (Porque hoy tampoco trabajan buena parte de los mortales de la tierra ésta). Así salió ayer el asunto social en la provincia. La Inmaculada, por anticipado La fiesta en sí no toca hasta dentro de 48 horas, pero los vecinos del Barrio de La Inmaculada han decidido celebrar por anticipado la fiesta que honra a su patrona. Así que ayer se lanzaron al magosto popular, y hoy, a las 19.00 horas, prometen poner moradito de tortilla a todo hijo de vecino que se acerque por los locales de la asociación. Había hasta no hace mucho incluso atracciones de feria, pero de momento, con lo que hay, no está mal. Salud y que dure muchos años el tema. San Isidro, a tope Si la inauguración de la temporada del sábado estuvo interesante, el domingo no anduvo lejos en afluencia de personas. Salió la cosa de lujo para el primer fin de semana que se abren las instalaciones, y lo pasaron en grande todos los que subieron a la estación de San Isidro. Valgrande Pajares también tuvo entretenimiento, pero no tanto personal, aunque ya hay tres kilómetros de pistas abiertos. A disfrutar. Voluntarios y generosos La Asociación del Voluntariado de Astorga congrega a todas aquellas personas que se ofrecen a colaborar en asuntos a los que otras instituciones, por motivos diferentes, no pueden llegar en un momento dado por limitaciones varias. Y para que el personal de la comarca conozca su funcionamiento, instalaron ayer una mesa en Astorga, en la que informaron a quienes quisieron recoger el mensaje, de todo lo que se refiere a su funcionamiento. Maite Almanza , delegada de Diario de León en aquella zona, pasó por allí, a la caza de la noticia, y también se enteró de cómo funciona el asunto. Ha prometido colaboración, y ella siempre cumple, que quede claro. Matrimonios enternecedores En los 20 meses del conflicto de Irak, miles de soldados, entre ellos muchos hispanos, protagonizan verdaderas historias de amor. Uno de estos cuentos de hadas en el fragor de la guerra es el caso de la soldado ecuatoriana al servicio del Ejercito de Estados Unidos Jamie Martínez, de 21 años, y de su compañero de armas Enesi Tuufuli, hawaiano de la misma edad, informó ayer el diario El Nuevo Herald , de Miami. No son de León, pero ¿a que en el fondo es una historia muy dulce? Pues eso.