Diario de León

Acunar a los hijos con el brazo izquierdo no es una anécdota

Una madre con su hijo recién nacido entre sus brazos

Una madre con su hijo recién nacido entre sus brazos

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Generalmente, las madres acunan a sus niños con el brazo izquierdo porque eso les ayuda a entender mejor su estado físico y emocional. Así se desprende de un estudio realizado por Victoria Bourne y la doctora Brenda Todd, de la universidad inglesa de Sussex, cuyos resultados se recogen en un artículo publicado en la revista científica Developmental Science. El contacto por la izquierda refuerza la relación de la madre con el niño, porque así la primera observa mejor y responde antes a cualquier síntoma como lloro, risa o bostezo. Victoria Bourne explica: «Cada hemisferio del cerebro realiza funciones distintas. Para la mayoría de la gente, el lado derecho del cerebro controla el lado izquierdo del cuerpo y las emociones. Nuestros descubrimientos indican que, para una madre con el cerebro bien organizado, acunar al niño a la izquierda es lo mejor para interpretar cómo se encuentra el niño. Sobre si esta apreciación vale tanto para las madres diestras como para las zurdas, Victoria dice: «No nos hemos preocupado mucho por esta situación anecdótica. Hay estudios a gran escala sobre ser diestro o zurdo, en los que hemos visto que hay muchas mujeres zurdas que también acunan a sus hijos con el brazo izquierdo». Anteriores estudios demostraban que entre el 70 y el 85 por 100 de las mujeres acunan a los niños con el brazo izquierdo. El equipo de Sussex realizó un experimento doble con más de 30 jóvenes estudiantes para conocer la relación entre la respuesta emocional del hemisferio derecho del cerebro y el hecho de acunar a los niños con el brazo izquierdo. Primero, se observó a las estudiantes acunando un muñeco de tamaño natural, como los que se utilizan para el entrenamiento de las enfermeras. Después se pidió a cada una que indicara distintas expresiones faciales que revelan si el sujeto utiliza el lado izquierdo o el derecho del cerebro para procesar sus emociones.

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