El único que no se vende
El concesionario Renault en León, Iban Hermanos, expone estos días uno de los monoplazas con los que el asturiano Fernando Alonso compite en los circuitos del gran circo de la Fórmula 1
Es el que más atrae al público; pero es el único que no está en venta. No es otro que el RW23 de Fernando Alonso, el monoplaza de Fórmula 1 con el que el piloto asturiano corrió en el campeonato de Fórmula 1 del 2003 y con el que el año pasado realizó una exhibición por las calles de Madrid. Se puede admirar desde ayer por la tarde hasta el sábado -excepto el jueves- en el concesionario de la marca del rombo en León, Iban Hermanos, en la Avenida de Madrid 116. Decenas de personas se agolparon ayer en la presentación de la exposición del monoplaza del piloto que despierta pasiones en España, que hace que miles de personas sean capaces de levantarse a las cuatro de la mañana para ver un gran premio. El gerente del concesionario leonés, Ramiro Díez Liébana, explica que es lo que esperan, aprovechar el periplo que durante un año está haciendo el coche de Alonso por los puntos de venta del país para dar a conocer la marca y su división Renault F1. «Queremos dar a conocer las ventajas y el desarrollo tecnológico en la Fórmula 1, que luego pasa a la calle además en nuestros coches», afirma. Liébana reconoce que Alonso, sus valores de esfuerzo, juventud y valía son importantísimos para la marca, pero recuerda que Renault lleva décadas en la F1 y que algunos de sus monoplazas han sido seis veces campeón del mundo. Ayer, la mitad del público eran chavales, muchos ataviados con la gorra, la camiseta o cualquier otra prenda oficial de Alonso y la marca del rombo. «Queremos que la gente joven se acerque a Renault por la F1», apuntaba Liébana. El piloto asturiano no estaba presente físicamente, pero un vídeo suyo explicó a los presentes los secretos, los momentos y la pasión del gran circo del automovilismo en el que ya se desenvuelve como pez en el agua. Mucho hincapié en la seguridad que se experimenta en la Fórmula 1 para llevarla a los coches de calle, una de las estrategias de ventas que explota como valor Renault. Para hacer más atractivo un evento tan especial de por sí como es poder casi tocar un monoplaza de Alonso, se sortearán además entre los que acudan a verlo un Clio Renault Sport 182 CV, un Megane Renault Sport 225 CV y 30 cursos de perfeccionamiento de conducción, además de una foto y un detalle «sólo por venir». Lo dicho, el RW23 será estos días el coche más codiciado del concesionario de Puente Castro y el único que no su pueda comprar... pero seguro que aumenta las ventas de otros modelos.