Mandela pide más refuerzos contra el sida tras la muerte de su hijo

El ex presidente sudafricano, Nelson Mandela, informó ayer de la muerte de su hijo mayor a causa del sida e hizo un llamamiento para renovar esfuerzos en la lucha contra esta extendida enfermedad. En una rueda de prensa ofrecida en su casa de Johannesburgo (Sudáfrica), el Premio Nobel de la Paz de 1993 admitió, por primera vez, que su hijo sufría este mal. Makgatho Mandela, de 54 años y único hijo varón superviviente del ex mandatario, falleció en el hospital de Johannesburgo. Llevaba varias semanas en estado crítico después de que se le ingresara a finales del pasado año. Su esposa falleció en 2003 de neumonía. Rodeado de su familia, Nelson Mandela, de 86 años, dijo que ya no tenía ningún sentido seguir escondiendo la enfermedad de Makgatho. Señaló que hablar abiertamente sobre el sida es la única forma de que deje de ser considerado como algo extraordinario y de pensar que por esa enfermedad «la gente va al infierno y no al cielo». En los últimos meses, Mandela había suspendido varias actividades para permanecer al lado de su hijo. Muchas de las mismas estaban ligadas precisamente a su campaña para luchar contra la epidemia del sida en Sudáfrica. En la rueda de prensa, Mandela aclaró que cuando decidió vincularse en esta campaña desconocía que el único varón que tenía entonces estaba contagiado con el virus. El hijo fallecido era abogado, se casó dos veces y tenía cuatro hijos. El hijo más joven de Mandela, Thembekile, falleció en un accidente de automóvil en la época en que el presidente estaba en la cárcel, durante el régimen del Apartheid. Los dirigentes de entonces no le permitieron asistir al funeral. Mandela, de 86 años de edad, tiene además tres hijas, una de su primer matrimonio con Evelyn Mandela.