Juan Pablo II evita la polémica y pide más cuidados a los enfermos desida
Juan Pablo II hizo ayer un llamamiento a la Iglesia Católica para que se incrementen los cuidados a los enfermos de sida en todo el mundo. «La Iglesia debe garantizar una particular atención a esas zonas del mundo donde los enfermos de sida no tienen asistencia», declaró el Pontífice ante los miembros del Consejo Pontificio para la Salud, aunque no hizo referencia alguna a la polémica sobre el uso del preservativo desatada en España por el portavoz de la Conferencia Episcopal, que mereció una llamada al orden desde Roma. Juan Pablo II se refirió a la fundación El buen samaritano, creada el mes pasado y cuyo objetivo es ofrecer medios terapéuticos en las comunidades más afectadas por el sida. Con todo, el presidente del Consejo Vaticano para la Salud, el prelado mexicano Javier Lozano, insistió en la doctrina ya conocida: «El sexto mandamiento lo dice claramente: no fornicar. No es una posición negativa. Nosotros lo que hacemos es defender la vida», aseguró. Por otro lado, las declaraciones de Fraga sobre el uso que él no había hecho del condón tuvieron respuesta desde el Consejo de la Juventud. Su presidenta, Lucía Salas, aseguró ayer que las palabras del presidente de la Junta eran «tremendamente más irresponsables que las de la Iglesia Católica», al tratarse de una persona que ostenta la responsabilidad de presidir una comunidad autónoma. Salas, que se reconoció católica, añadió que la postura de la Iglesia no se corresponde con la opinión generalizada de la base cristiana y es irresponsable «porque no responde a las acciones de los movimientos sociales dentro de la Iglesia que desarrollan en el tercer mundo donde el trabajo de cooperación para erradicar el sida y la pobreza es fundamental». Las Juventudes Socialistas también criticaron a Fraga y le pidieron que rectificara sus declaraciones como gesto de respeto a los enfermos de sida y a los profesionales y voluntarios que luchan contra la epidemia. Manuel Fraga efectuó ayer una nueva referencia a sus polémicas declaraciones en las que aseguró que no haría más referencias a su «parcela privada» ya que las últimas le han llevado a las páginas de muchos periódicos.