La industria reducirá las grasas, azúcares y sodio de los alimentos

Se llama Naos y es la nueva Estrategia para la Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad del Ministerio de Sanidad. Su titular, Elena Salgado, presentó este plan global para corregir la peligrosa deriva que amenaza con convertir a España en un país de gordos y enfermos en potencia. Incluye acuerdos voluntarios con la industria alimentaria para rebajar los niveles de grasas saturadas, azúcares y sodio de comidas y bebidas preparadas. Y busca, en conjunto, mejorar las pautas alimentarias y fomentar la práctica de ejercicio. España está aún en posiciones intermedias en Europa de sobrepeso (38,5% de la población entre 25 y 60 años) y obesidad (14,5%) en adultos, pero se ha disparado la prevalencia entre los niños de 6 a 12 años hasta el 16,1%, sólo superados por los chicos de Italia, Malta y Grecia. De esta realidad «aún en lo terreno de lo prevenible», y de la abundante evidencia científica sobre los problemas de salud achacables a la obesidad nace la Naos. La estrategia ha sido coordinada por la Agencia de Seguridad Alimentaria y han participado todas las administraciones, sectores industriales implicados, expertos y asociaciones de consumidores. Incide sobre varios ámbitos de actuación. La escuela -menús escolares y educación nutricional-, los medios de comunicación, la publicidad, la sanidad y la divulgación ciudadana. En el campo empresarial compromete la colaboración de seis confederaciones nacionales para la reducción progresiva de la sal en el pan (Ceopan), que pasaría del 2,2% actual al 1,8% en cuatro años; suprimir la instalación de máquinas expendedoras (Aneda) de comidas y bebidas de fácil acceso para los niños y eliminar la publicidad de esas máquinas.