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La prometida del príncipe de Gales nunca será reina, será princesa consorte y duquesa de Cornualles

Carlos de Inglaterra cumple su sueño y anuncia su boda con Camilla

El enlace civil se celebrará en el castillo de Windsor ante la familia y amigos íntimos

Publicado por
Manuel Allende - corresponsal | londres
León

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El heredero a la corona británica, Carlos de Inglaterra, ha tenido que esperar casi toda una vida para ver realizado uno de sus sueños, contraer matrimonio con Camilla Parker-Bowles. Y mientras los británicos digieren la noticia divididos, el país se prepara para la boda del año que tendrá lugar el 8 de abril con una ceremonia civil celebrada en el castillo de Windsor. La principal preocupación de los británicos, saber si Camilla será su futura reina, quedaba despejada desde el primer momento. Será duquesa de Cornualles y cuando Carlos sea rey, princesa consorte, la primera en la historia de la familia real inglesa. Era una de las mayores y más incómodas incógnitas de un país que no está acostumbrado a las sorpresas e improvisaciones. Al final, tras casi 35 años de relación, dos divorcios, un triángulo amoroso tormentoso, la muerte violenta de Diana y un goteo muy cuidado de la imagen de Camilla en la sociedad, Carlos cree que ha llegado el momento para contraer segundas nupcias con su amor de toda una vida. «Mi futura mujer y yo estamos absolutamente encantados y muy emocionados», indicaba el escueto comunicado emitido por Clarence House, residencia oficial de Carlos. Ceremonia íntima Poco ha trascendido sobre cómo será la ceremonia. Se sabe que sólo asistirá la familia y amigos más cercanos a los novios, que será civil, seguida por una misa en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor, celebrada por el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams. El total apoyo de éste último garantiza la aceptación del matrimonio por parte de la Iglesia anglicana, a pesar de que si algún día es rey, Carlos será el cabeza de esta Iglesia, y de ahí que en algunos sectores su próximo matrimonio no esté bien visto. Muy sonrientes y relajados, los prometidos se dejaron ver anoche en el castillo de Windsor (afueras de Londres), donde Camilla lució una joya de diamantes perteneciente a la Familia Real británica que le ha regalado Carlos como anillo de pedida. La prometida, vestida con un elegante traje rosa que le favorecía especialmente reveló que su futuro esposo le pidió que se casara con ella reclinado sobre una rodilla. Visiblemente emocionada por ese gesto de Carlos, Camilla confesó: «Estoy empezando a volver a la Tierra». Carlos y Camilla, que asistieron a una cena de gala, llegaron por separado al castillo. Fuera del recinto real, un grupo de curiosos desafiaron la pertinaz lluvia inglesa para poder ver al heredero a la Corona y a su futura esposa. «Hemos esperado un hora y media. Deseábamos verlos pasar, pero estamos decepcionados porque no hemos podido», comentó Jacqui Hunt, una de los congregados a las puertas del castillo, al agregar que el anuncio del enlace es una «noticia fabulosa». «Estoy empezando a volver a la Tierra» CAMILLA PARKER Primera frase de la prometida después de que el príncipe Carlos le pidiera el matrimonio arrodillándose ante ella «Mi vida ha sido una tragedia griega por el sufrimiento de no poder estar, desde el principio, con la mujer con quien comparto afinidades culturales y deportivas» CARLOS DE INGLATERRA