Inglaterra especula con que Carlos nunca será rey

Tenía que haber sido el día más feliz en las vidas de Calos y Camilla. Sin embargo, a medida que se acerca el 8 de abril se está convirtiendo en una pesadilla que puede terminar como las Bodas de sangre lorquianas. Con el anuncio de que la madre del príncipe Carlos, la reina Isabel II, no asistirá a la ceremonia civil entre Carlos y Camilla Parker Bowles, los medios de comunicación sensacionalistas se disparaban ayer para calificar el suceso de «desaire colosal», «decisión destructora y sin precedentes» y de «crisis» en la monarquía británica. Tras la marejada desatada por la «bomba real», como titulaba ayer The Sun , Buckingham Palace rechazaba que la reina adoptara esta decisión como un desaire a su hijo y a Camilla o porque pensara que su presencia rebajaría a la monarquía. La portavoz de Buckingham indicaba que la decisión de la soberana responde a los deseos de los novios de celebrar una ceremonia discreta. «La presencia de la soberana daría a la ceremonia un mayor foco de interés público por lo que no habría la discreción que buscan los novios», indicó la portavoz. Desde formalismos jurídicos, la reina es cabeza de la Iglesia Anglicana, por lo que sería incongruente que asistiera a una ceremonia civil. Ésta será la primera ocasión en la que un monarca británico no asiste a la boda de uno de sus hijos en 142 años, lo que ha hecho crecer las especulaciones sobre la posibilidad de que ya se haya acordado en la Casa Real que Carlos nunca será rey y que abdicará en favor de su hijo Guillermo. Una boda legal En la ceremonia civil no estarán presentes tampoco su padre ni sus tres hermanos, Andrés, Eduardo y Ana. De cualquier manera la reina y su marido el Duque de Edimburgo asistirán a la misa de bendición celebrada por el Arzobispo de Canterbury en la capilla del castillo de Windsor. «La reina está contenta de poder ofrecer a los novios una ceremonia seguida por una recepción en el Castillo de Windsor oficiada por ella», indicaba la portavoz de la Casa Real. A principios de semana se había especulado con que la ceremonia podría ser ilegal, ya que los matrimonios reales no se ajustan a la Ley Matrimonial de 1949 que permite las ceremonias civiles. El lord Chancellor indicó ayer que la ceremonia era legal. A medida que se suceden los escándalos, aumenta el hastío en la sociedad.