La ampliación del museo ha costado 40 millones dólares y más de diez años de trabajo
En él se exponen numerosos objetos de la Segunda Guerra Mundial y de la vida judía en Europa antes y durante el Holocausto que no tenían cabida en el actual espacio.
El conjunto es mucho más moderno que el anterior y su principal objetivo es competir al alza con los más de 250 museos del Holocausto que existen en todo el mundo, la mayoría de los cuales se han creado en la última década.
Se utilizan técnicas que ya han sido introducidas en otras galerías en años recientes, e incluso se ha recurrido a copiar directamente la estructura de algunas salas de museos de Estados Unidos.
Los líderes judíos están preocupados por la posibilidad de que «una excesiva exhibición del Holocausto, puede llevar a una distorsión de la Historia y a una pérdida del estatus del genocidio como un acontecimiento hebreo
Para causar mayor impacto se ha registrado el testimonio directo de testigos y supervivientes y se ha suprimido a conciencia cualquier interferencia de historiadores o expertos
Más de 40 mandatarios internacionales han tomado parte en los actos inaugurales del nuevo Museo del Holocausto en Jerusalén, en los que se han revivido los horrores que sufrieron seis millones de judíos.
El primer ministro israelí, Ariel Sharón, declaró posteriormente que «Yad Vashem» -como se conoce al museo-, «es la cámara de la memoria del corazón del pueblo judío».
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, reiteró que la organización que lidera debe «permanecer eternamente vigilante ante la erupción del antisemitismo y el racismo».
El museo ha costado 40 millones dólares y más de diez años de trabajo, y en sus salas alberga objetos auténticos de la Segunda Guerra Mundial y de la vida judía en Europa antes y durante el Holocausto.
Cerca de 90 testimonios de víctimas de la barbarie nazi, recreados con objetos, fotografías, ilustraciones, música e imágenes, colaboran en «la recreación» del exterminio nazi.
La ceremonia han sido seguida por centenares de personas, entre los que se encontraban los máximos representantes políticos de Israel, así como decenas de supervivientes del Holocausto.
La ceremonia han sido seguida por centenares de personas, entre los que se encontraban los máximos representantes políticos de Israel, así como decenas de supervivientes del Holocausto.