La familia de Sampedro cree un error archivar la causa de Ramona

La decisión del Juzgado de Instrucción número dos de Ribeira de archivar las diligencias abiertas contra Ramona Maneiro en relación con la muerte de Ramón Sampedro ha provocodo reacciones contrapuestas, según el cristal a través del que se mire. El auto que la amiga del tetrapléjico sonense interpreta en clave de satisfacción y alivio, ha sentado entre algunos miembros de la familia de Sampedro Cameán como un jarro de agua fría. Para la cuñada del autor de Cando eu caia las heridas continúan abiertas. Manuela Sanlés no oculta que la resolución judicial no es de su agrado, más bien, le provoca un gran malestar, si bien reconoce que, con la ley en la mano, no cabe más que hacer lo que hizo el tribunal ribeirense, o sea, concluir que el delito que se le podría imputar a Ramona Maneiro ha prescrito. Una y otra vez, la cuñada de Sampedro reitera su convencimiento de que en el fondo de la confesión de Ramona subyace un interés económico y un afán de notoriedad. «Nos hizo mucho daño y fue muy mala, queremos que de una vez por todas deje en paz a Ramón», sentenció Sanlés. En posteriores declaraciones a Europa Press, la cuñada de Sampedro, Manuela Sanlés, manifestó: «Por mí la querría encerrar toda la vida por ser tan mentirosa, pero si la Justicia lo cerró, está cerrado». Así, la cuñada de Ramón, visiblemenbte afectada, señaló ayer tras conocer la resolución a Ramona como «la mujer más asesina que hay en el mundo». «Debería pagar como todos, no anda más que al dinero», subrayó. «Si la Justicia lo cerró, ahora que la dejen para hacer otra», concluyó. En cambio, Ramona Maneiro no quiere entrar en polémicas y sobre esas acusaciones se limitó a decir: «A mi que me demuestren con pruebas que cobre un euro». Sobre el fallo judicial, la amiga de Ramón Sampedro aseguró sentirse muy orgullosa de la labor de la justicia y de que, por fin, «dejen de incordiarme y de perseguirme», según dijo. El revuelo desatado con su confesión ha sido tal que Ramona Maneiro comentó que en los últimos meses no ha parado de recibir llamadas de televisiones de Alemania, Chile, Gran Bretaña y Portugal y hasta tiene ofertas para editar un libro. A la presidenta de la Asociación Derecho a Morir Dignamente Galicia, Carmen Vázquez, el sobreseimiento no le cogió por sorpresa porque era lo que ya todos esperaban. La directiva lamenta que la actuación judicial y la confesión no hayan servido para reavivar con seriedad el debate por la despenalización de la eutanasia. «Por lo que a mí respecta, la querría ver encerrada toda la vida por ser tan mentirosa; pero si la Justicia decidió cerrar el caso, cerrado está» MANUELA SANLÉS Cuñada de Ramón Sampedro