La poca lluvia augura una primavera tranquila para los alérgicos

La escasez de precipitaciones de este invierno augura una primavera tranquila para los alérgicos. La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) prevé que las concentraciones de polen de gramíneas no sobrepasen los 4.000 gramos por metro cúbico de aire, lo que permite aventurar una incidencia «leve o moderada» de este alérgeno. El presidente del Comité de Aerobiología de la SEAIC, Javier Subiza, pronostica menos ingresos hospitalarios por asma que en años anteriores. Determinados pacientes tienen la suerte de que su afección se manifiesta sólo en forma de rinitis, con la aparición de síntomas nasales. Sin embargo, el peligro estriba en que los enfermos de rinitis acaben padeciendo asma bronquial, algo que en el centro de la Península ocurre en el 40% de los casos. Un estudio de la SEAIC que cuenta con la participación de 1.300 pacientes españoles con rinitis alérgica pone de manifiesto las molestias que entraña esta enfermedad. Un 62% de los encuestados reconoce que su patología dificulta su vida laboral. El inicio de la primavera en el hemisferio norte se produjo las 13.33 hora oficial peninsular, y la estación se prolongará durante 92 días, 18 horas y 13 minutos con un progresivo alargamiento de los días. En la península, ese aumento de las horas de sol se apreciará por la mañana y por la tarde, ya que cada día el sol saldrá dos minutos antes que el día anterior y tardará en ponerse tras el horizonte un minuto más cada día. Se producirán un eclipse de sol y uno de luna, aunque ninguno de ellos será visible desde España. Se podrá observar Marte durante los amaneceres de la estación y los planetas Júpiter y Saturno estarán visibles en las puestas de sol del mes de abril, a los que se unirá Venus a partir de la segunda semana de mayo.