El español vio cumplido su sueño la primera vez que pisaba las pistas del torneo francés.
Hasta el Court Central Philippe Chatrier se desplazaron los reyes para apoyar a Nadal.
El duelo duró 3 horas y 24 minutos.
El primer set fue muy parejo y finalizó en «tie-break» a favor de Puerta 7-6 (8/6), después Nadal se soltó más.
Ambos jugadores habían llegado por primera vez a la final de un torneo de Gran Slam.
Para el balear ésta fue su primera participación.
En la segunda manga, Nadal quebró el saque a su rival en el cuarto game (3-1) y eso fue decisivo para llevársela.
La tercera fue la más neta para el balear, que fue más preciso en las dejadas y en los tiros angulados contra las líneas, quebrando el servicio de su adversario en tres ocasiones (1-0, 4-1 y 6-1).
En Manacor, localidad donde nació el campeón, celebraron por todo lo alto el triunfo de su paisano.
El rey de España estaba en la tribuna presidencial, junto a la reina Sofía, que partió tras finalizar el partido porque la infanta Cristina acababa de dar a luz una niña.
Nadal, de 19 años recién cumplidos, era favorito en los papeles porque lo que va de la temporada 2005 para él ha sido de ensueño.
Los trofeos al ganador y finalista fueron entregados por el presidente de la Federación francesa (FFT), Christian Bimes, junto al futbolista Zinedine Zidane.
«Para mí es increíble haber podido ganar en Roland Garros. Fue un sueño, la primera vez que jugaba aquí (...)» dijo Nadal tras la final.