EL PULSO Y LA CRUZ
Hay que tener por el carro
SEGUIMOS a la expectativa, que es perseverar en la oración «pro eligendo Pontifice». Probabilísimamente la próxima entrega de este «pulso» tendrá que estar dedicada a quien haya sido elegido nuevo Papa, sucesor de Pedro en el Primado de la Iglesia. Para entonces -esperemos- los señores Cardenales habrán hecho sus deberes, impulsados no tanto por los dimes y diretes de la farándula mediática, cuanto por el discreto aliento del Espíritu Santo. A nosotros nos toca en estos días previos al lunes, cuando ellos se reúnan para la primera votación, elevar los brazos hacia el cielo y solicitar a quien corresponde que ilumine las mentes, el corazón y las manos de los cardenales electores. Aquí sí que cabe decir, sin ningún atisbo de fatalismo, «que sea lo que Dios quiera». Que querrá lo conveniente para su Iglesia en los comienzos del III Milenio del Cristianismo. Aunque -posible siempre es- nosotros no entendamos ni jota de los planes que Dios tiene. Pero no se olvide: para con Dios, hay que tener por el carro. Por eso no sobrará la oración. La vida sigue Mientras tanto, la vida sigue. En Roma, con todo el runruneo de los enviados especiales de los medios de comunicación como telón de fondo, y en el resto de la cristiandad, con menos datos a mano, pero seguramente con más fe en la providencia y, por eso, con más potencia en la oración. Digo yo. Después de diversas celebraciones ofrecidas por el eterno descanso del Papa Juan Pablo II, estamos en estos días abriendo la agenda a otras centradas ya en el futuro: la elección del nuevo Papa. Sin ir más lejos, mañana mismo, en la Catedral de León, el señor Obispo, don Julián López Martín, presidirá una Misa ofrecida con esa intención. Será a las 6 de la tarde. Ocasión, pues, tenemos, de reforzar nuestra unidad y de ir abriendo puertas al futuro que viene. Decíamos que la vida sigue. Ahí está el santo empecinamiento de los feligreses de San Justo de la Vega. Con el Papa de cuerpo presente, ellos se empeñaron en seguir con la tradición de la subida de su Santo Toribio hasta el crucero de los altos del Tuerto y depositar allí su piedra reparadora. Lo intentaron el sábado día 2; no pudo ser por la lluvia; volvieron a las andas y a las andadas el domingo, e ídem de lienzo; y, por fin, el lunes, día 4, temblando por si el cielo se mostraba benigno con los campos y maligno con los peregrinos, se echaron cuesta arriba, con santos y pendones, para repetir los ritos ancestrales que recuerdan la retirada del santo Obispo y facilitan la expresión de buenos -esperemos que lo hayan sido- deseos. Otro ejemplo está en el desarrollo del Año Jubilar en León: ya han tenido ocasión de celebrarlo los funcionarios de prisiones y sus familias, los políticos y gobernantes, y los enfermos y agentes de pastoral de la salud; en cartera están los integrantes de las fuerzas armadas y cuerpos de seguridad del Estado, más policía municipal (día 19), los catequistas y profesores de religión (día 23), los internos del Centro Penitenciario (día 23) y el mundo de la Universidad (día 26); luego seguirán otros sectores y, a partir del día 1 de mayo, con la romería de Valdorria, irán escalonándose los días jubilares en los diferentes santuarios elegidos como lugares especiales de peregrinación. Que sirva lo programado al bien que tiene que servir: la santificación de las gentes con ocasión de estas efemérides en torno a la Virgen del Camino y a San Froilán. También con ese fin último, ojalá cuaje el intento que se está poniendo en marcha de poder contar con una pequeña masa coral que entone, periódicamente, melodías gregorianas en lo que queda del monasterio de Santa María de Sandoval, en las cercanías de Mansilla de las Mulas. Suerte y temple para la asociación Promonumenta y para los posibles directores, Antonino Martínez y Jesús Tascón. En la misma línea habrá que situar la puesta de la primera piedra de lo que habrá de ser el Hogar Europeo de Encuentro (HEE) que, en Foncebadón han colocado el Obispado de Astorga y Cáritas alemana, con el fin de acoger en su día a jóvenes desarraigados sociales de toda Europa. Que no se nos pasen sendas alusiones: una, al I Congreso regional de Enseñanza Religiosa, que tiene lugar a estas horas en Valladolid, con nutrida presencia de astorganos y leoneses; otra, a las VIII Jornadas de la Familia, que organiza en León la Delegación correspondiente; a partir del lunes, a las 7,30 de la tarde, en el Salón de Actos de Caja España. Ya ven. La vida sigue.