La misa, oficiada por el cardenal Joseph Ratzinger, ha contado con la presencia de los 114 cardenales electores.
La misa comenzó con una procesión de los cardenales electores en el pasillo central de la Basílica, que terminó con el beso al altar de San Pedro.
Mientras, los cardenales no electores, los mayores de 80 años, se sentaron en las primeras filas.
También han podido asistir normales ciudadanos que han asistido por primera vez a esta misa celebrada «para que el Señor ilumine a los cardenales a la hora de elegir al nuevo Papa».
La Basílica de San Pedro se ha encontrado repleta de fieles, entre ellos los embajadores ante la Santa Sede.
Posteriormente, hacia las 16:00 horas, los cardenales se acercarán en procesión a la Capilla Sixtina para comenzar las votaciones, donde realizarán el juramento de mantener el secreto.