La policía investiga la muerte de la menor que denunció acoso escolar

La policía de Elda, en Alicante, investiga si el acoso escolar es la causa del suicidio de Cristina Cuesta, una joven de la localidad. Su cadáver fue encontrado el martes bajo el puente de la Libertad. La joven, de 16 años, se lanzó al vacío desde una altura de 25 metros presuntamente tras haber sufrido una agresión en el centro escolar donde estudiaba, el Instituto Sagrada Familia de Elda. Una chica encontró el cuerpo sin vida de Cristina en el cauce del río Vinalopó y avisó a la policía. La joven falleció a las 19,30 del martes en el Hospital Virgen de la Salud de Elda. Las compañeras de la menor, cuyos padres habían denunciado hacía unos meses ante la Comisaría que la joven era víctima de acoso escolar, aseguraron que la chica era víctima de acoso por parte de tres compañeras de clase que «la insultaban y amenazaban» y que la semana pasada le causaron un accidente de moto. Así, las menores del Colegio Sagrada Familia de Elda explicaron, ante las preguntas de los medios de comunicación, que tres compañeras de clase de la menor fallecida, conocidas como Las chulas acosaban a la menor. Al parecer, en el colegio había dos grupos y la menor fallecida era muy estudiosa, por lo que se burlaban de ella. Al parecer, la joven «les plantó cara» y a partir de ahí, según explicaron, comenzaron «los insultos y amenazas», hasta que la semana pasada, mientras la joven fallecida iba circulando con su ciclomotor le provocaron una caída. Por este motivo, añadieron que su madre decidió llevarla y traerla en coche al colegio, algo que hizo ayer mismo. Tras recogerla del colegio, llevó a la menor al dentista y no supo nada más de ella hasta que la policía la llamó para avisarla de que habían encontrado su cuerpo sin vida. Una charla Por su parte, el director y gerente del centro privado, Ignacio Bleda, indicó que en el colegio sólo tuvieron constancia de un altercado entre la menor y otras tres niñas, ocurrido el pasado mes de diciembre y que terminó en una denuncia de los padres en la Comisaría de Elda. En este sentido, expuso que los padres fueron al centro y que mantuvo una entrevista con ellos, en la que les aconsejó que solucionaran de forma amistosa el problema antes de presentar la denuncia, algo que finalmente hicieron. Tras estos hechos, Bleda aseguró que no volvieron a tener conocimiento de ningún incidente más. Para acabar con los casos de violencia en las aulas y de acoso escolar -también conocido con el término de bulling- la Conselleria de Educación y Cultura de la Generalitat Valenciana ha puesto en marcha este mes de mayo una campaña destinada a detectar el acoso en los institutos. La campaña incluye la proyección de unos cortos en los que se recrean situaciones reales de violencia física, agresiones verbales, xenofobia y conductas antisociales. La campaña ya puede verse en las aulas de los institutos de secundaria de la Comunidad Valenciana. Tras las proyecciones, los alumnos participan en un debate sobre el acoso escolar. Los expertos aseguran que al menos el 20% de los chavales reconoce haber sufrido algún tipo de exclusión en el centro escolar. La clave es cómo detectar estos casos. Expertos en Psicología aplicada a los adolescentes dan algunas pistas. Aseguran que los alumnos acosados suelen presentar síntomas inequívocos y comunes a las víctimas de cualquier tipo de violencia, física o verbal: apatía, falta de atención en clase, baja autoestima y miedo atroz a acudir al centro escolar. «A los padres les dije que el incidente había ocurrido fuera del colegio y que, bajo ningún concepto, se toleraría que hubiese algún tipo de insulto o agresión » IGNACIO BLEDA Director del Instituto donde estudiaba la joven