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UNIVERSIDAD DE LEÓN SUIZA GREENPEACE

Patentado un aparato que mide fácilmente las masas forestales Colocan una manta para proteger un glaciar de la radiación solar Expedición al Polo Norte para analizar el deshielo

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Alfonso Fernández, profesor de la Universidad de León, ha inventado un dendroflexómetro, es decir, un aparato que mide de forma sencilla las masas forestales. Se trata de una especie de cinta métrica que permite calcular directamente el perímetro del tronco sin rodearlo, su altura y, además, el área basimétrica, o lo que es lo mismo, la suma de las secciones normales de todos los árboles que forman una masa forestal expresada en metros cuadrados/hectáreas. El dendroflexómetro es uno de los pocos dispositivos patentados en el sector forestal y sirve para obtener datos con una precisión y fiabilidad suficientes lo que permitirá satisfacer las necesidades de los silvicultores. Las autoridades de la localidad de Andermatt (Suiza) han colocado una manta para proteger de la radiación solar su principal atractivo turístico, el glaciar de la estación de esquí Gemsstock. La gigantesca manta, que ha costado unos 75.000 euros, ocupa una superficie de 3.000 metros cuadrados, está fabricada con poliester y como es de color blanco es difícil distinguirla de la nieve lo que favorece que refleje la luz solar evitando el deshielo del glaciar. Los científicos creen que soluciones como ésta sólo sirven para evitar el deshielo de una zona concreta pero no la degradación que sufren las zonas heladas de los Alpes y de otras partes del planeta. La organización ecologista Greenpeace patrocina una expedición que cruzará por primera vez el Polo Norte andando y en canoa con el fin de dar la voz de alarma sobre el deshielo provocado por el cambio climático. Su aventura concluirá dentro de cuatro meses en la isla de Ellesmere en el ártico canadiense y tiene como objetivo demostrar que se puede llegar en canoa mucho más al norte de lo que se cree. Además, el próximo mes de julio coincidirá su travesía con la reunión del G-8, algo que aprovechará Greenpeace para presionar a Estados Unidos, el país que más contamina, para que ratifique el Protocolo de Kioto.

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