Los ginecólogos prevén un aumento de la tasa de partos con cirugía
Los médicos dicen que se harán más cesáreas para evitar denuncias
Un estudio en ratones revela que las crías de madres añosas pueden tener dificultades
La medicina defensiva también se instala en los paritorios. Al menos así lo reconocen los propios especialistas. El presidente de la Sociedad Española de Ginecología, José Manuel Bajo, advirtió ayer en A Coruña que «los jueces están dictando una nueva obstetricia» y vaticinó que el temor a las denuncias aumentará el número de cesáreas. «La sociedad demanda una madre y un hijo sano, y si no ocurre, se culpa al obstetra; en América -añadió- ante la mínima complicación se abre a la madre». En España, país al que en su día se acusó de abusar de esta técnica (es uno de los índices de calidad hospitalaria), la tasa de cesáreas se sitúa en un 21%, inferior a la de Francia, Reino Unido, Italia, y muy por debajo de la de EE. UU. «Hacemos las que hacemos por indicación médica, para disminuir el riesgo fetal y básicamente evitar lesiones neurológicas por un parto difícil», explicó Antonio González, de La Paz. «Todos estamos de acuerdo en que no se pueden abrir puertas; si hiciéramos a todas las mujeres cesáreas, porque todas tienen miedo al parto, nos evitaríamos complicaciones, pero tendríamos otras por la morbilidad infecciosa, las hemorragias, el riesgo de embolia...», subrayó. Bajo insistió en «descriminalizar» la medicina y apuntó que «una cosa es el error médico, y otra el resultado adverso».