Descubierto el lugar del nacimiento de miles de estrellas Nuevo fármaco contra la osteoporosis Los «Homo sapiens» más antiguos de Europa tienen 31.000 añosDesaconsejan prescribirantidepresivos a niños y adolescentes Sedentarismo y obesidad reducen la vi

Las cámaras infrarrojas del telescopio situado en el observatorio Spitzer de la Nasa han podido descubrir a unos 10.000 años luz de la Tierra el nacimiento de miles de estrellas. Las imágenes han recogido que brotan de columnas de polvo que surgen de la nébula Carina, una enorme nube de polvo y gases que ocupa un espacio de 200 años luz en la Vía Láctea. Tras analizar a más de 6.000 mujeres mayores de 74 años y con problemas óseos, el estudio Tropos, dedicado al tratamiento de la osteoporosis, ha anunciado la existencia del «ranelato de estroncio», un nuevo fármaco que reduce en un 36% el riesgo de sufrir fracturas de cadera en mujeres con osteoporosis postmenopáusica. Los fósiles de Homo sapiens más antiguos de Europa han sido localizados en la población checa de Mladec. Los arqueólogos han podido analizar restos de cráneo, huesos y dientes, así como utensilios encontrados junto a ellos, llegando a la conclusión de que su edad es de 31.000 años y corresponden al Paleolítico Superior. Así lo ha anunciado la Agencia Europea del Medicamento debido a los riesgos de comportamientos agresivos y suicidas asociados a algunos de ellos en edades tempranas. Además, recuerdan que sólo deben recetarse en casos de depresión grave y que la psicoterapia es el primer tratamiento de la depresión en menores de edad. Según los expertos en endocrinología, en la última década se ha duplicado la obesidad entre los niños españoles, con una prevalencia del 14%. Los problemas derivados del sobrepeso provocarán que los niños de hoy serán menos longevos. Los investigadores cuentan con una nueva herramienta de estudio microbiológico. Se mueve y busca su alimento como cualquier bacteria normal, mientras es estudiada por los investigadores, pero no en una placa de Petri, sino en una sofisticado programa informático llamado «Agente celular» (AgentCell) desarrollado por la Universidad de Chicago y el laboratorio nacional Argonne. Se trata de la más compleja creación digital de una bacteria creada hasta la fecha y de la que se pretende obtener valiosa información para aplicaciones en la lucha contra el cáncer, desarrollo de nuevos fármacos y combatir al bioterrorismo. La información publicada en la revista especializada Journal Bioinformatics , destaca el hecho de que las simulaciones hechas hasta ahora sólo mostraban el comportamiento a nivel molecular, celular o de poblaciones bacterianas, mientras que Agente celular puede hacerlo simultáneamente en los tres niveles. El haber obtenido este nivel de complejidad es lo que permite que los científicos cuenten ahora con un software con el cual poder simular poblaciones enteras de células, observando cómo detectan el ambiente, mientras responden a estímulos moviéndose en un ambiente tridimensional. Experimentos biológicos Para probar la verosimilitud de Agente celular, los científicos han verificado su exactitud mediante diversos experimentos biológicos. De esta forma, el programa podrá ahorrar una gran cantidad de tiempo a los científicos en el laboratorio. Cada célula digital en Agente celular, es una bacteria Escherichia coli virtual que está equipada con todos los componentes virtuales necesarios para buscar alimento. La bacteria cuenta con sus propios sistemas de transmisión de señales bioquímicas responsables de la locomoción celular, así como los flagelos que la propulsan. El diseño de la bacteria digital fue realizado en módulos para poder añadir componentes adicionales más adelante. Por el momento la bacteria Escherichia coli digital es un modelo muy simple a decir de sus creadores, ya que sólo cuenta con un sistema sensorial, pero más adelante se podrán agregar otros componentes adicionales, tales como procesos biológicos que simulan la división de la célula. El software estará disponible para su transferencia directa en www.agentcell.org, en donde otros equipos de investigadores podrán añadir nuevos códigos que se traduzcan en nuevas capacidades para las bacterias digitales. Hasta el momento el Agente celular ha rendido ya su primer fruto al descubrirse que una proteína controla en Escherichia coli su sistema de búsqueda de alimento.