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Publicado por
LUIS ARTIGUE
León

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CIUDAD inventada resumen del mundo, Londres, ciudad-templo de algunos y refugio de todos, leyenda urbana, explícita canción de los Rollings, Historia moderna¿ Por primera vez ocurre algo antes en la imitativa Madrid que en Londres. ¿Qué es? ¡!Una desgracia terrorista! Uno siempre ha tenido la sensación de que Londres es una ciudad que está boca abajo pues lo más interesante no son sus rascacielos sino sus casas bajitas y sus pequeños rincones, el Soho, la gente misteriosa, Noting Hill, los pubs perdidos con música en directo en los que los clientes beben rápido antes de que suene la campana ¡última ronda! Londres intenso pero no Picadilly, Portobello y la Tate Gallery, no, sino más bien la gente estresada comiendo por la calle, los artistas callejeros con algo de mendigos y otro tanto de hippies, los taxistas sirios y la policía en coches-patrulla que parecen ambulancias, cielo gris, autobuses rojos, cantantes y trabajadores serios en el metro. Londres: el Londres underground. No deja de sorprender el hecho de que esa ciudad-mundo tan británica y cosmopolita, tan multicultural y divertida, sea objeto del terrorismo feroz islamista. Y de repente lo que fue modernidad postcolonial da marcha atrás porque el país se ha metido en guerras petrolíferas repletas de consecuencias. ¡Vaya frenazo del tiempo y de la Historia! Entonces el Londres Babel, el Londres uderground, se encoge de hombros como un inocente y se siente extranjero en su propia casa, amenazado, amenazante. La mayor colonia islámica de Europa, dice la prensa, se encuentra en Londres y desde allí se editan los periódicos más radicales y se pronuncian los discursos más fundamentalistas de parte de imanes exaltados. Allí, en el corazón al borde del infarto de Europa, el hecho religioso se transforma en terrorismo amenazando así nuestra forma e vida y nuestro lugar en el mundo. Y acaso la gran reflexión que ha de producir esta última masacre islamista de Londres no haya de ser el odio o la venganza, sino la integración. No es el Islam lo que amenaza occidente sino la pobreza y el fanatismo. Acaso la integración en occidente -en vez de los prejuicios y la beligerancia- pudiera hacer más por la paz al intentar conseguir que los inmigrantes islámicos que vienen a Europa puedan ver como realmente occidente avanza mejor gracias a la democracia, y al libre mercado, y a la libertad. Acaso nuestra predisposición a la integración de la emigración pudiera hacer más por derrotar a la barbarie que nuestra inclinación al prejuicio y a la confrontación. Antes de que los atentados internacionales se conviertan definitivamente en una versión siglo XXI de guerra mundial, acaso el G-8 y las grandes instituciones supranacionales, por un lado, y todos y cada uno de nosotros individualmente por el otro, tengamos que hacer un esfuerzo muy humano para integrar a los y las inmigrantes tratándolos de uno en uno sin prejuicios religiosos, raciales o de ningún tipo. La superioridad de nuestra cultura de existir -cosa dudable a veces- no se puede lucir aplastantemente sino demostrar en el día a día con inteligencia y valores para que quienes vienen aquí puedan perder los prejuicios en vez de corroborarlos. En esta era caótica y superficial en la que cada uno atiende a lo suyo necesitamos el diálogo profundo, la integración, la empatía social, pues hemos llegado a un grado tal que hasta el entorno de la religión islámica se está olvidando de lo que es el Islam. Así las cosas Londres, a pesar de todo, no debe inclinarse del lado del odio sino del de la sensatez aleccionadora. No, esa ciudad no puede perder su rumbo, su modernidad y su humor ingles ni siquiera ahora. Ah, el humor inglés. Acaso, como dice Woody Allen, el humor inglés no existe pues los ingleses no tienen sentido del humor: es que son así y nos hacen gracia.

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